Escribí esta historia para los pequeños soñadores, como recordatorio de que los sueños pueden hacerse realidad, aunque a veces no sea exactamente como lo imaginamos. El secreto está en mantenerse positivos, defenderlos y esforzarse por alcanzarlos.
En este episodio te comparto un cuento de mi autoría que nos enseña de amistad y amor propio, perfecto para escucharlo con los pequeños de la casa y reforzarle estos valores.