DiscoverLas Bienaventuranzas y Virtudes Teologales
Las Bienaventuranzas y Virtudes Teologales
Claim Ownership

Las Bienaventuranzas y Virtudes Teologales

Author: P. Gerardo Casillas González

Subscribed: 0Played: 0
Share

Description

En la primera temporada hablamos de los dones y frutos del Espíritu Santo, como 20 días de preparación a Pentecostés. En esta segunda temporada conoceremos las 8 Bienaventuranzas y 3 Virtudes teologales. Cómo caminos de perfección que nos remontan a las cumbres de la vida espiritual.
12 Episodes
Reverse
Esta es una de las bienaventuranzas que nos llevan a las alturas y al desprendimiento de las cosas terrenales, Dios es el tres veces Santo y para llegar hasta Él, hemos de desprendernos de las cosas terrenales para contemplar la divina pureza que Dios es.
Hoy recordamos en toda la Iglesia a Jesús Eucaristía, sacrificio incruento ofrecido para la salvación del género humano. El cordero pascual que se ofrece obediente al Plan que Dios le ha pedido para la humanidad.
La misericordia es propia de Dios, de lo divino, en la vida humana conocemos la justicia, pero amar no solo a quienes nos aman, sino amar a los enemigos es algo que el hombre nunca se habría imaginado en su egoísta corazón.
El alma después de caminar los las cumbres altísimas de la perfección cristiana busca sacar su hambre y sed de justicia que no encuentra en este mundo y se refugia en el Señor quien viene a saciar esa búsqueda en la vida contemplativa.
Hoy celebramos en toda la Iglesia en misterio central de nuestra fe. Creemos en Dios que es Padre, Hijo y Espíritu Santo. El Padre es amor, el Hijo es amor y el Espíritu Santo es amor. El Padre ama con amor Paterno, el Hijo ama con amor filial y el Espíritu Santo ama con amor Esponsal, maternal.
Esta tercera bienaventuranza nos lleva al desprendimiento de las cosas terrenas, aprender a morir a nosotros mismos, descubriendo las miserias de las cosas y las personas. Solo Dios se vuelve nuestro consuelo, al no tener en donde reclinar la cabeza, el alma se vuelve a Dios como su seguro refugio.
Maravillosa dulzura que parece debilidad y es fuerza, que todo lo alcanza sin violencia y sin ruido, que mantiene sin lucha La Paz. La ira nos hace perder el dominio de nosotros mismos, turba la paz y la armonía de nuestro reino interior; la dulzura mantiene inalterable la paz en los confines de ese reino.
El jueves posterior a Pentecostés celebramos la fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote. En ella recordamos y agradecemos el que Jesús sea el Sacerdote de la Nueva alianza y eterna, nos ha reconciliado con Dios y nos ha llamado a formar parte de su Iglesia.
Son ocho las bienaventuranzas, pero realizan una sola perfección y brindan una sola felicidad. La pobreza de espíritu nos aleja del apego a las cosas materiales, para llenarnos de Dios. Nos hace sentir la dicha de ser puros, qué significa el alejamiento del mal y aproximación a Dios, el bien supremo.
En esta introducción pretendo resumir las ocho bienaventuranzas como caminos de felicidad, esas que Jesús pronunció en el sermón del monte. Es un itinerario de virtudes que solo se avanza en ellas con los dones del Espíritu Santo.
Comenzamos una segunda temporada para acompañar la segunda parte del tiempo Ordinario, meditando las bienaventuranzas como los dones más exquisitos que el Espíritu Santo puede ofrecer en esta vida, son dones que nos colocan en la cumbre de la perfección cristiana. Es necesario conocerlos para que, cómo los alpinistas comenzar a subir la montaña para acercarnos más al cielo.
Comments