Dora y Sandra son dos mujeres salvadoreñas que cumplieron condenas de más de una década y que ahora, en libertad, enfrentan la estigmatización en una sociedad que no ofrece garantías de readaptación. Esta es la historia de cómo ellas hacen frente al abandono de un Estado que solo supo condenarlas y de cómo es resistir desde la sororidad.
Carmen Fabián fue detenida en 1989 durante el conflicto armado. Su padre fue preso político en la década de 1970 y en el régimen de excepción, impuesto por el gobierno de Nayib Bukele desde marzo de 2022, ha visto a dos de sus hijos detenidos. En el episodio 2 del pódcast “Semprando Memoria Feminista” reflexiona sobre las similitudes de estos momentos históricos, sobre la impunidad, cómo la colectividad le ha permitido luchar y las perspectivas de futuro que nos pueden dar las juventudes.
Miss Universo 2023 ha sacudido a El Salvador. Pero en 1975, un presidente reconocido por sus medidas represivas trajo el concurso al país en afán de lavarle la cara. En este podcast, Lya Cuéllar y Valeria Guzmán, periodistas, ven y comentan el concurso de Miss Universo de 1975, mientras discuten el contexto histórico en el que ocurrió.Créditos: Este podcast es una producción de Alharaca.Guion: Lya Cuéllar y Valeria GuzmánEdición y diseño sonoro: Marcela BenítezIlustración: Beatriz Martínez Clips: Miss Universe 1975 - The Miss Universe
En la primera de dos entregas del pódcast “Sembrando Memoria Feminista” entrevistamos a Diána López, una mujer de 25 años, originaria de la zona rural del municipio de Las Vueltas, Chalatenango, y quien es activista desde los 12 años.Con ella abordamos cómo el activismo y la labor de defensa que realizan las mujeres feministas de las zonas rurales se entrelaza con los derechos comunitarios, la memoria, la defensa de los recursos naturales y del territorio. Las lideresas arriesgan sus vidas al enfrentar violencias que se encuentran aún más arraigadas en zonas remotas, donde todas las personas se conocen. “En las comunidades no es fácil. A veces, al enterarme de que una mujer está siendo víctima de violencia y tratar de ayudarle sin también meterme en problemas yo”, explica en una parte de la entrevista.Como en otras zonas del país, Diana reflexiona sobre cómo las juventudes están viéndose afectadas por una migración cada vez más grande lo cual ella vincula al régimen de excepción aprobado desde marzo de 2022. “En mi comunidad (el régimen de excepción) ha afectado muchísimo porque hay mucho miedo. En mi comunidad yo puedo decir en un 100% que no hay grupos de pandillas. Pero (el régimen) ha llevado a una situación en la que los pocos jóvenes que quedan en mi comunidad, porque son muy pocos ya, tengan que migrar y ver nada más hacia el norte como el único lugar donde tienen que salir. (...) Para mí es doloroso saber que estos jóvenes están yendo”.De cómo se enfrentan estas realidades, cómo se construyen redes de apoyo para resistir desde la esperanza y cómo se conecta el pasado con las injusticias que vivimos actualmente es lo que abordamos en este episodio.Con el proyecto “Sembrando Memoria Feminista”, construimos memoria para no repetir la historia. Para resistir juntas desde la esperanza queremos contar las historias de mujeres que luchan por defender derechos, por vencer la impunidad, por encontrar la verdad y obtener justicia.Créditos:Este podcast fue una coproducción entre Salvadoreñxs Construyendo Memoria y Alharaca; Entrevista: Alejandra Burgos; Guion, dirección y producción creativa: Jimena Aguilar, Sildania Murcia, Diana Díaz, Alejandra Burgos y Sara García; Producción: Mónica Campos; Edición: Marcela Benítez; Ilustración: Beatriz Martínez
Karina Alas comprendió la importancia de la defensa de los recursos de sucomunidad agrícola a través de las ecofeministas que su madre, Guadalupe, recibió ensu vivienda. Hoy, juntas, resisten a la reactivación del proyecto minero Cerro Blanco,en Guatemala, a 10 minutos de distancia de sus viviendas.
Pita Floja, un caserío salvadoreño fronterizo con Santa Ana, casi nunca vellover. La crisis climática y el fenómeno de El Niño solo recrudecen las condiciones eneste caserío de total dependencia de la agricultura. A esto, se añade la posiblereactivación de la mina Cerro Blanco, a cinco kilómetros de distancia.
La Asociación de Mujeres Ambientalistas de El Salvador (AMAES) esresponsable de la organización de un grupo de mujeres agricultoras en el fronterizocaserío Pita Floja, a cinco kilómetros del proyecto minero Cerro Blanco. Desde allá,ellas resisten a la desidia ambiental y al machismo.
La falta de una ley de identidad de género en El Salvador genera vulnerabilidad y violaciones de derechos a las personas trans. Poder obtener un documento de identidad que las identifique de acuerdo a su género queda bajo la opinión de los jueces de Familia del país.Por Angélica Ramírez (Alharaca, El Salvador) y Gabriela Méndez (Revista GatoEncerrado, El Salvador).Esta es una producción del proyecto Cambia la Historia promovido por el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores con la colaboración de la DW Akademie y Alharaca.
Ser gay, lesbiana o transgénero en República Dominicana es todo un reto. Quienes enfrentan este drama cotidiano en las calles de Quisqueya, dan fe y testimonio con basta claridad en sus vivencias, dentro de la que converge la discriminación, la violencia e incluso la muerte. La historia de Félix Montaño, conocido popularmente como Félix Lombardís, es un ejemplo vivo de cómo la orientación sexual de una persona lo puede convertir en el centro de toda clase de humillaciones, por lo que apela a que el Congreso Nacional dominicano apruebe legislaciones más inclusivas.Por Karen Vásquez (Noticias KV), República Dominicana.Esta es una producción del proyecto Cambia la Historia promovido por el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores con la colaboración de la DW Akademie y Alharaca.
Benito Chicas, conocido como Sebastián Torogoz, es uno de los fundadores de Los Torogoces de Morazán, grupo de música popular y de protesta surgido en El Salvador en junio del 1981. Durante 11 años estuvieron vinculados con la subversiva radio Venceremos, convirtiéndose en una especie de juglares de en tiempos de la guerra civil, ahora continúa haciendo música de protesta, pero esta vez en respuesta al Gobierno de Nayib Bukele.
A finales de la década de 1990, un grupo de mujeres estudiantes de octavo grado desafiaron a sus compañeros varones a jugar un partido de fútbol y este deporte dejó de ser un deporte exclusivo de hombres. Desde esa fecha, más de 300 mujeres han sido parte de los equipos de fútbol en esta comunidad de personas refugiadas del conflicto armado en Cabañas. Escuchá su historia en este podcast.
En Tapachula y Huixtla, dos municipios en la frontera sur de México, decenas de mujeres migrantes trabajan de día y de noche en el comercio sexual. Su presencia es parte de la cotidianidad de ambas ciudades, incluso para las autoridades locales. Laura Aguirre viajó al lugar para conversar con dos mujeres sobre cómo es ejercer a diario el trabajo sexual en una zona donde confluyen la regulación y la informalidad, la protección y la persecución, la exclusión y la sororidad. Y cuenta la historia en este podcast:*Este reportaje fue publicado como parte del proyecto 10 HistoriAs Migrantes realizado por Chicas Poderosas, la comunidad global que promueve el liderazgo femenino en medios y genera oportunidades para que más voces sean escuchadas. El proyecto fue posible gracias al apoyo de Google News Initiative, Swedish International Development Cooperation Agency (SIDA), Meedan y Check. Para ver todas las #HistoriasMigrantes, visita bit.ly/historiasmigrantes.
La periodista Vilma Laínez conoció el caso de la desaparición de Roxana y María en 2019 en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desparición Forzada. Habló con Estela y Esperanza, las madres de estas dos chicas de Antiguo Cuscatlán que desaparecieron en enero de 2016. Ellas le contaron cómo han buscado solas a sus hijas por más de cuatro años, y cómo se sintieron abandonadas por un Estado que hasta 2018 creó un mecanismo para buscar a personas desaparecidas. Ellas son solo dos de las 35,000 personas que fueron reportadas como víctimas de desaparición (antes tipificada únicamente como privación de libertad) entre 2005 y 2018, según registros de la Policía Nacional Civil. De ese total, solo 827 personas fueron encontradas con vida. Del resto no se sabe nada sobre su paradero. En 2019, la Asamblea Legislativa reformó el Código Penal para incluir el delito de «desaparición de personas», delito que puede ser castigado con hasta 25 años de prisión. Este delito se distingue de la desaparición forzada, la cual es efectuada por funcionarios públicos o personas naturales por orden de funcionarios públicos. Familiares de personas víctimas de desaparición también se unen a la conmemoración del del día de las desapariciones forzadas.Cada 30 de agosto, el sistema de Naciones Unidas conmemora el “Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas”. La Asamblea General de esta organización internacional firmó una declaración en la que los Estados firmantes se comprometen a no tolerar las desapariciones forzadas y a tomar medidas legislativas, judiciales y administrativas para prevenir y erradicar actos vinculados a este delito, que también considera como una grave violación a los derechos humanos. En plena pandemia por el COVID- 19, el fenómeno de las desapariciones ha continuado. La Fiscalía General de la República registraba a diario 6 denuncias de desapariciones entre los meses de enero y mayo. Han pasado casi cinco años desde la desaparición de dos jóvenes de Antiguo Cuscatlán. Sus madres, al igual que muchas otras, terminaron cumpliendo la función de detectives, buscando a sus hijas en hospitales y morgues. Hasta ahora, la Fiscalía General de la República se rehúsa a darles avances sobre el caso. Ellas siguen buscando.Corrección 16/10/2020: Dentro del podcast se indentifica de forma errónea el delito de «desaparición de personas» como «desaparición forzada». El delito del que este podcast habla está tipificado como «desaparición de personas».