Mientras más control tenemos por dentro, menos control necesitamos tener sobre lo que está afuera.
Que las expectativas de la sociedad no se conviertan en un obstáculo para poder reconocer lo que necesitamos sanar, para ser honestos con nosotros mismos, y transformarnos en una versión más feliz.Â
El amor empieza desde nosotros mismos, desde el amor propio y nuestro sentimiento de valÃa
Cuando le perdemos miedo al dolor emocional, ocurren cambios increÃbles en nuestra manera de ver las situaciones difÃciles, aprendemos a ver el regalo que hay detrás.
Cuando este crÃtico interior tiene mucho espacio en nuestra mente, no dejamos espacio para nuestro amor propio y pensamientos que alimenten nuestra mejor versión.
Cuando validamos las emociones de los demás, les comunicamos aceptación
El perfeccionismo afecta incluso nuestra socialización, porque la gente normal tiene malos dÃas, inseguridades, defectos, y si no somos capaces de mostrar este lado de nosotros, les más difÃcil para los demás poder empatizar y crear una conexión genuina con nosotros, porque no se sienten identificados. Dejar atrás el perfeccionismo mejora nuestra vida.
¿SabÃas que es completamente normal sentirse juzgado durante la terapia?
La positividad Tóxica, no solo te desconecta de tu verdad, te desconecta de quien eres en realidad
Convierte tus inseguridades en seguridades.
La persona que actúa de manera pasivo agresiva no es mala, se siente mal.
Aceptarnos a nosotros mismos disminuye la culpa, aumenta el autoestima y nos hace mas fuertes emocionalmente.
Cuando nos acostumbramos a ser complacientes, nos desconectamos de nuestras propias necesidades.
Cuando creas esa validación interna, esta se manifiesta en tu realidad.
Los pensamientos negativos pueden dejar una huella si no sabemos ponerles un alto.
Adaptarnos es nuestra herramienta más poderosa.
Entendernos a nosotros mismos nos ayuda a ser compasivos y eliminar la culpa
Perder el miedo a la desaprobación es clave para ser tu mismo
Éxito es obtener lo que quieres, felicidad es querer lo que obtienes