Fíjate, te has planificado. Has escogido tu estilo inversor ideal, pero... ¿Puedes hacerlo mejor? Probablemente sí. Revisa tu estrategia y márcate nuevos objetivos.
"No estoy preparado" no entra en nuestro diccionario. Y pagar comisiones demasiado altas tampoco debe ser una opción. Descubre qué otros fallos comunes puedes evitar.
Un segundo. Adquirir productos financieros no es igual que comprar un tomate. Te explicamos las claves para que entiendas su fiscalidad, tributación y rendimiento.
Los fondos se diseñaron para facilitar que personas como tú y como yo podamos invertir. Mira qué beneficios tienen este y otros productos financieros.
¿Por qué? Sus posibilidades son infinitas y lo mejor es que no tienes que ser millonario para acceder a las empresas que mandan en el parqué.
Más o menos sabes lo que significa y... Bah. Te sorprendería lo que te puede ayudar conocer sus comisiones, sus riesgos y cómo invertir en ella.
Mirar al pasado te puede ayudar a no meter la pata en el futuro. Aprende a invertir de los mejores. La clave está en el largo plazo.
¿Conoces las diferencias principales entre depósitos? ¿Usas alguna herramienta de ahorro? No me respondas, mejor dale al play.
Tranquilo, vas a seguir teniendo vida. Planificar quiere decir saber cuánto ahorrar, cómo diversificar y empezar con cantidades pequeñas.
El objetivo de este capítulo es perder el miedo a invertir, deshacer mitos extendidos y poner a trabajar nuestro dinero. Eso sí, las formas también cuentan.