Uno de los lugares que más fortalece la fe del creyente es estar “a solas con Dios”. Nuestro Señor Jesucristo nos dejó la gran enseñanza acerca de la oración y donde efectuarla con eficacia: “Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público” Mateo 6: 6
10:37 Porque aún un poquito, Y el que ha de venir vendrá, y no tardará. 10:38 Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma.
18:24 El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; Y amigo hay más unido que un hermano.
11:31 Por la fe Rahab la ramera no pereció juntamente con los desobedientes, habiendo recibido a los espías en paz.
1:4 ¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas artesonadas, y esta casa está desierta?
3:14 Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.
3:18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.
1ra. a los Corintios 4:1 Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios. 4:2 Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel.
6:9 como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos;