DiscoverMadres Separadas o Divorciadas
Madres Separadas o Divorciadas
Claim Ownership

Madres Separadas o Divorciadas

Author: Miren Zurutuza

Subscribed: 0Played: 0
Share

Description

Hola Soy Miren Zurutuza, Coach & Mentora de Familias, Aquí encontrarás información sobre separaciones o divorcios, familias reconstituidas y educación para tus hijos. Comparto herramientas y recursos, de autoconocimiento, de gestión emocional, de comunicación, de educación respetuosa y mucho más, para mejorar y transformar tu vida y la de tus hijos después de separarte o divorciarte y sentirte segura de ti misma y ser ejemplo para tus hijos.
11 Episodes
Reverse
En este episodio vamos a hablar sobre las distintas fases o etapas emocionales de la separación o el divorcio. Más concretamente de las fases del proceso de duelo que atraviesas cuando te separas o divorcias. Durante este proceso se viven muchas emociones a la vez. Por eso es importante tener información sobre toda esta etapa que vas a vivir y las fases por las que pasarás. Estos cinco estadios son la negación, la ira, la negociación, la depresión y la aceptación. Yo añadiría uno más, el perdón. El duelo es una herramienta necesaria para lidiar de una forma sana con la pérdida. Si estás atravesando alguna de estas etapas espero que esta información te ayude a transitarla con más comprensión. Si quieres ampliar información en mi web www. mirenzurutuza.com puedes descargarte mi Guía Práctica con las 8 claves para afrontar tu divorcio y reorganizar tu vida. Espero que tengas una semana genial y te espero la próxima semana. Un abrazo
Hoy en este episodio voy a hablar de la importancia de buscar ayuda, apoyo y acompañamiento en el proceso de divorcio para sobrellevar toda esta la situación. Si estas atravesando una época de tormenta y de vorágine emocional, te recomiendo que antes de tomar decisiones desde la rabia y la ira, busques la calma y no entres en luchas de poder con tu ex. Ante esta situación los que más van a sufrir son tus hijos. Son momentos que hay que tomar decisiones importantes y el hecho de tomar malas decisiones por falta de asesoramiento o de información en pleno divorcio a medio y largo plazo suele tener consecuencias negativas tanto para ti como para tus hijos. Por ello, te recomiendo contar con un profesional como un coach o un mentor que te ayude, te guíe, y te acompañe a gestionar todas las fases emocionales por las que vas a pasar. Te hará ver las situaciones con más perspectiva y te ayudará a tomar las decisiones más acertadas en todo momento tanto a nivel personal como con tus hijos. Además, te ayudará a sentirte segura, a creer en ti misma y buscar las mejores soluciones para ti y tus hijos facilitándote pautas y herramientas para gestionar toda esta situación que estáis viviendo. El Coaching es una disciplina muy practica que te ayuda a moverte del punto A, donde te encuentras, al punto B, donde quieres llegar. Se trabaja con lo que tú necesitas y con lo que necesitas lograr en tu vida. El coach te va orientando para lograr tus objetivos y mantener tu plan trabajando con tus miedos, tus creencias limitantes, tus saboteadores internos, tus emociones y así mantenerte enfocada en lo que quieres conseguir a través de las distintas herramientas. El coaching es práctico, rápido y te ayuda a ponerte en movimiento. Te pone en acción y cuando hay compromiso los cambios son profundos y duraderos para lograr una vida más feliz.
Hoy en este episodio hablaremos de cómo debes de apoyar y acompañar a tus hijos en la separación y el divorcio. En el anterior episodio vimos que una de las grandes preocupaciones y un gran miedo de los padres o madres a la hora de separarse o divorciarse tiene que ver con los hijos. Por un lado, cómo decírselo, lo hablamos en el episodio anterior y por otro, después de dar ese paso, cómo afecta esta nueva situación a su estado emocional y a su vida. Una vez dado el paso de contarlo a los hijos y al entorno más cercano como la familia y los amigos, se abre otra nueva etapa tanto en tu vida, como en la de tus hijos y en la de tu ex pareja o marido. Comienza un nuevo proceso de transición y adaptación para todos y cada uno de vosotros y cada uno lo vive de distinta forma. Como todo cambio en la vida nos enfrentamos a nuevas situaciones, retos y dudas, que dependiendo de la actitud que tomemos como adultos tendrá un impacto y unas consecuencias positivas o negativas en la educación y desarrollo de vuestros hijos. Tenemos que tener en cuenta que la manera de reaccionar de nuestros hijos ante la separación o el divorcio depende de su edad, personalidad, madurez y las circunstancias del proceso de separación o divorcio. Por eso debemos de estar atentos para responder ante sus necesidades tanto personales como educativas que vayan surgiendo en el día a día para acompañarles con cariño, respeto y comprensión. Durante este proceso puede que tus hijos estén distantes, apáticos, desafiantes, agresivos, confusos o con cambios de humor. Puede que su comportamiento empeore y su rendimiento académico baje. Sea como sea nuestra labor es apoyarles y acompañarles en todo este proceso. Lo ideal, lo más saludable y recomendable para todos es que vuestros hijos vean y sientan que en vuestra separación o divorcio hay respeto, armonía y coherencia. Tenemos que procurar mantener la estabilidad en casa y atender sus necesidades con una actitud positiva y tranquilizadora. Puede que te preguntes si eso es posible por todos los casos que conozcas o por la situación personal que estás viviendo tú. Quiero decirte que, si es posible, todo depende de nosotros, los adultos. En muchos casos de separación y divorcio la primera etapa suele ser tensa, debido a la custodia de los hijos, los motivos de la separación, los temas económicos, las tensiones emocionales, los sentimientos encontrados, la ira, la culpa, el miedo etc. Con el paso del tiempo todo se va atenuando y se tiende a calmar la situación, además los hijos van creciendo y esto hace que a medida que se acercan a la mayoría de edad ellos vayan eligiendo y tomando su propio camino. A continuación, voy a darte algunas recomendaciones para acompañar emocionalmente a vuestros hijos y comentarte como podéis conseguir que vuestra separación o divorcio sea lo menos dolorosa posible para vuestros hijos. Recomendaciones para ayudar a nuestros hijos a superar una separación o divorcio 1. Ayúdales a identificar y a gestionar todas las emociones que le genera la separación o el divorcio, como tristeza, rabia, ira, miedo e inestabilidad. La inestabilidad emocional es bastante habitual y por eso es importante que sientan vuestra seguridad y confianza. Para ello el primer paso es poder conectar con ellos, ya que sin conexión no hay comunicación. Por ejemplo comentarle, “Parece que estás triste en este momento. ¿Sabes qué es lo que te hace estar triste?”, “Si hay algo que te preocupa, aquí estoy para ayudarte y apoyarte en lo que necesites”. Escucha atentamente sus respuestas, incluso aunque te resulte desagradable lo que tiene que decirte. Pregúntale: “¿Qué crees que te ayudaría a sentirte mejor?” “¿Qué necesitas para sentirte mejor?”. En el caso de que no lo sepa le puedes proponer algunas ideas. Tal vez no se le ocurra nada en concreto, pero puedes proponerle algunas ideas siempre adaptadas a su edad. Si no quieren hablar no los fuerces y avasalles con preguntas para que te cuenten, cuando quieran y les llegue el momento te irán contando. 2. Utiliza un vocabulario positivo y realista en lugar de catastrófico ya que esto ayuda a tus hijos a evaluar la situación de forma más real. 3. Intenta consensuar unas pautas educativas respetuosas en común con tu expareja, estableciendo normas comunes y límites claros y ajustados a la edad de vuestros hijos. Les proporciona mucha seguridad y les ayuda a adaptarse a su nueva vida. Soy consciente que hay casos que esto no es posible. 4. Nunca, nunca utilices a tus hijos para hacer daño a tu expareja. No discutas o pelees con tu ex delante de ellos. No les hables de tu ex de forma despectiva, irónica o culpabilizando. No les involucres en los conflictos que puedas tener con tu ex y tampoco los utilices de mensajeros. No les sometas a interrogatorios para saber que hacen o dejan de hacer cuando están con tu ex. Todas estas situaciones les crea sentimientos encontrados y de desconfianza. 5. Dales tiempo y libertad para adaptarse a la nueva situación que están viviendo para amoldarse a todos los cambios que les va a tocar vivir. Toda adaptación debe de hacerse de forma gradual, poco a poco. Tienes que tener paciencia porque esta situación va pasando por distintas etapas. 6. Establece rutinas y normas para adaptarse de manera más sencilla a su nueva situación. En tiempos de cambio, es importante que tus hijos que mantengan rutinas ya que les proporciona seguridad. 7. Observa a tus hijos si tienen cambios de conductas en la alimentación, el sueño, en el colegio o instituto etc. Acepta todas las emociones que están viviendo tus hijos y demuéstrales tu amor incondicional. 8. Date permiso para sentir todas las emociones que sientas y dejar el sentimiento de culpa de lado. 9. Toma perspectiva ante las situaciones que pueden surgir en el día a día entre tu ex y tus hijos para ser los más objetiva posible y no reaccionar delante de tus hijos dejándote llevar por la vorágine emocional y la rabia que te pueda causar. 10. Deja de competir con tu ex de a quién quieren más tus hijos. No utilices los regalos ni el dinero para comprar su amor. Lo mejor que puedes hacer es dedicarles tiempo e interesarte por sus intereses y aficiones. 11. Prioriza las necesidades de tus hijos, y no entres en una guerra con tu ex para ver quién gana. Hay que ver cuál es la situación que más conviene para tus hijos ya que no todos los niños se adaptan a vivir en dos casas. Algunos padres deciden permanecer los dos en la misma casa, y esto solo funciona en situaciones muy puntuales. Es una cuestión difícil donde suele haber grandes desacuerdos. Si tus hijos quieren compartir más tiempo con uno que con otro, no lo tomes como algo personal. Es importante que sepan que pueden contar con el apoyo de ambos. 12. Cuídate para poder cuidar de tus hijos. Se vives momentos de estrés, es importante que te cuides tanto a nivel físico como emocional ya que cuanto mejor te sientas mejor podrás cuidar de tus hijos. 13. Busca ayuda y acompañamiento profesional especializado en divorcios ya que atravesar este periodo a veces es complicado. El hecho de ver lo que estas viviendo con perspectiva te ayuda a aprender de toda esta situación y salir fortalecida. Comienzas a ser consciente de muchas circunstancias tanto del pasado como del presente. Te hará acortar los plazos de recuperación y te ayudará a transformar y a mejorar tu vida. 14. Acompaña a tus hijos a gestionar todo este proceso de cambio. Ayúdales a que hablen contigo, un amigo, con un adulto de confianza o en el mejor de los casos con un terapeuta especializado en familia acerca de lo que están viviendo. Si no quieren hablar respétales sus tiempos ya que puede que necesiten tiempo para verbalizar lo que están viviendo. Soy consciente de que en muchas de las separaciones o divorcios esto no es así, que no llevan a la práctica ni la mitad de estas recomendaciones y es uno de los grandes problemas que desestabiliza a nuestros hijos. Si estás viviendo una situación de divorcio complicada o conflictiva y tus hijos están sufriendo porque tu ex esta teniendo una actitud alejada de algunas o muchas de estas recomendaciones que te estoy comentando, mi sugerencia es que tú sigas estos consejos independientemente de lo que haga tu ex, porque tus hijos necesitan sentir tu apoyo y acompañamiento. Tu eres su referente y su ejemplo y si a veces no sabes cómo responder o que decir a tus hijos porque toda esta situación te desestabiliza pide ayuda. Espero que toda esta información te sirva de guía y apoyo. Mi objetivo es que puedas vivir una separación o divorcio lo menos conflictiva posible por ti y tus hijos. Si estas atravesando una situación complicada no dudes en buscar apoyo. Cómo sé lo que es estar en esa situación todos mis programas y cursos están dirigidos a acompañarte en todo ese proceso. Me puedes localizar en mi web www. mirenzurutuza.com y contactarme vía WhatsApp. Disfruta esta semana. Un abrazo Miren
Hoy en este episodio voy a hablarte de cómo decirles a tus hijos que os vais a separar. Este es un tema que preocupa mucho a los padres y madres, sobre todo porque muchas veces no se sabe cómo plantearlo. Además, hay que tener en cuenta que al separarnos tenemos sentimientos de culpa y de miedo. Somos nosotros los que más presión sentimos y más culpables nos sentimos. Hay estudios que avalan que el nivel de felicidad de los hijos no depende de que sus padres estén juntos o separados. El que tus hijos vivan en una relación toxica entre vosotros y estén presenciando discusiones, gritos y faltas de respeto, eso sí es muy dañino para ellos. Una separación o divorcio es siempre mejor que una relación familiar toxica, a pesar de la edad que tengan tus hijos. Tenemos que dejar a un lado la frase que tanto escucho “no me separo por mis hijos”. Precisamente si estas en una relación que ya no es sostenible por tus hijos deberías de separarte o divorciarte. Según las estadísticas cada vez hay más separaciones y divorcios, por lo cual poco a poco tenemos que ir normalizando este tipo situaciones. Aunque una separación o divorcio no es nada agradable, si hay una forma respetuosa de hacerlo una vez llegado a este punto. Una separación respetuosa o saludable para todas las partes si es posible, para papá, mamá y los hijos. Hay separaciones y divorcios donde los hijos son felices y la clave para esto es, no utilizar a nuestros hijos por ninguna de las partes, sino dejarles ser y apoyarles y acompañarles en su crecimiento. Si es cierto que en muchos casos no es así, pero todo depende de cómo lo hagamos nosotros, papá y mamá, que somos sus grandes referentes. Como padre y madre tenemos que tener claro que lo que se rompe es la relación de pareja y no la relación con los hijos. La separación es un punto en la vida, y a partir de ahí comienza otra nueva etapa. Es importante saber gestionar tanto el momento de la separación como la vida que tendremos a partir de la separación. Vamos a ver que debes de tener en cuenta a la hora de decir a tus hijos que os separáis: 1. Ante todo, es importante que una vez tomada la decisión, no lo ocultéis a vuestros hijos, ni lo prolonguéis en el tiempo. Es importante que seáis vosotros quienes se lo comuniquéis y que no sea a través de otra persona. Los niños son muy observadores y detectan muchas situaciones antes de que nosotros las verbalicemos. 2. Antes de hablar con tus hijos es importante realizar un trabajo personal emocional para no proyectar tus emociones. Si tu crees que la otra persona es la culpable de que os separéis, emocionalmente se lo vas a transmitir a tus hijos, De ahí la importancia de saber gestionar tus emociones a la hora de transmitir el mensaje a tus hijos. 3. Lo ideal es hacerlo conjuntamente, papá y mamá juntos, previo acuerdo entre ambos de lo que le vais a transmitir. Muchas veces esto no es posible debido a las circunstancias que se están viviendo y el mal rollo que hay entre papá y mamá. En el caso de comunicarlo por separado hay que tratar de ser lo más coherentes posible, sin culpabilizar al otro progenitor. 4. Hay que buscar el momento adecuado, un momento tranquilo donde se pueda tratar este tema. Es importante que no sea antes de acostarse, o mientras se está comiendo, o antes de ir al colegio o mientras están jugando etc. 5. El mensaje que se les transmite debe de ser objetivo, sin entrar en grandes detalles y adaptado a la edad que tienen. No es lo mismo transmitir el mensaje a un niño de 5 años, a un niño de 12 años o a un adolescente. Hay que adecuar las palabras que se utilizan, la forma que se emite el mensaje y las explicaciones. Incluso sus dudas serán distintas. 6. En el mensaje que se transmite tiene que quedar claro, que es una decisión de papá y mamá, una decisión de adultos y que ellos no tienen nada que ver. Ellos no tienen toda la información que tenemos los adultos de porque se llega a una separación y se pueden sentir culpables y esto les puede generar mucho sufrimiento. De ahí es importante dejarles claro que no son responsables ni culpables de que papá y mamá hayan tomado esa decisión. 7. A partir de ahí, hay que comentarles cómo va ser su vida, decirles que su familia no se rompe, sino que se transforma y que papá y mamá vivirán en distintas casas o lo que hayáis acordado respecto donde y con quien van a vivir y como va a ser su vida. Para ellos es un gran momento de incertidumbre, por eso es importante que tengan esta información y decirles que siempre tendrán el apoyo y amor incondicional de los dos. 8. Hay que dar la opción a los hijos de hablar, de preguntar, de aclarar sus dudas porque además puede que tengan alguna duda sobre algún tema que no les hayáis comentado. En el caso que no tengáis la respuesta clara sobre alguna cuestión en concreto, le podéis decir que papá y mamá tenéis que hablar sobre ese tema y que en cuanto lo sepáis se lo haréis saber. 9. Es importante que no hagáis posicionarles hacia ningún lado, ni hacia papá ni hacia mamá y no utilizarlos de confidentes. 10. Es normal si en este momento lloran, se enfadan o que no digan nada. Cada niño actúa de distinta forma y todas las formas de reaccionar son respetables. Todos necesitamos tiempo para asimilar cambios en nuestra vida, unos necesitan más tiempo y otros menos. Lo importante es que ellos sientan ese acompañamiento emocional por vuestra parte en ese momento. Como te he comentado anteriormente, hay casos en que las situaciones son muy complicadas. Por eso habrá que ver en cada situación concreta como hacerlo de la mejor forma posible para los hijos. A partir de este momento la familia se transforma y entráis en otra fase de vuestra vida. Vosotros como pareja separada y vuestros hijos con un papá y una mamá que viven en distintas casas. A partir de aquí se dan infinidad de situaciones en el día a día para adaptaros a la nueva situación. Si estás viviendo o estas apunto de pasar por este momento y sientes que no sabes cómo gestionarlo, como decírselo a tus hijos, puedes contactarme a través de WhatsApp en mi web www.mirenzurutuza.com y vemos cómo puedo ayudarte. Si ya has pasado por ese momento en el próximo episodio te hablare de como acompañar emocionalmente a tus hijos después de decirles que os separáis. Espero que esta información te ayude. Nos vemos en el próximo episodio. Un abrazo
Hoy quiero hacerte reflexionar sobre un tema o término que se utiliza mucho, el de papá o mamá tóxica, cómo detectar si eres uno de ellos, cómo afecta esto a tus hijos y el primer paso que deberías dar para dejar de actuar de forma tóxica con tus hijos. Este comportamiento no sano en muchas ocasiones viene determinado por la infancia que has tenido, por como te han tratado, por las creencias y experiencias que has ido adquiriendo a lo largo de tu vida y un etc. más. Saber cómo nos afectan todas estas circunstancias es un tema muy profundo que nos ayuda a cambiar muchas actitudes en nuestra vida y a tener una mejor relación con nosotros mismos, con nuestros hijos, pareja, ex pareja, padres, en definitiva con todas las personas que nos rodean. Ahora juntos vamos a reflexionar sobre algunos temas que seguro que te van a ayudar a ser más consciente para ser mejor padre o madre y mejorar la relación con tus hijos. ¿Qué significa ser padres tóxicos? El término padres tóxicos lo define, por primera vez, Susan Forwad en su libro Padres que odian (Toxic Parents). Son aquellos, que por diferentes razones, causan sufrimiento a sus hijos a través de la manipulación, el maltrato, las demandas, desde la infancia hasta la adultez. Cuando hablamos de padres tóxicos puede ser un padre o una madre o ambos progenitores. Estos progenitores causan en sus hijos un sufrimiento innecesario, manipulan, maltratan, dominan, abusan y buscan que sus hijos hagan lo que ellos quieran y no les deja ser. El dejar ser es una parte muy importante para el crecimiento y desarrollo de los hijos, ya que está relacionado con su identidad, su personalidad, sus necesidades y sus gustos. A veces se confunde el dejar ser con el que no tengan límites o que hagan lo que quieran y es todo lo contrario. Cuando más les dejas ser, más respetarán los límites que les pongas ya que tendrán mayor conexión contigo. ¿Cómo saber si eres un padre o una madre tóxica? Parto de la base que la mayoría de progenitores como padre o madre queremos lo mejor para nuestros hijos. A veces los padres y madres no somos conscientes, no nos damos cuenta y no sabemos las consecuencias que tienen nuestros comportamientos y cómo repercute en la seguridad, el autoconcepto, la autoestima, en definitiva, en la salud mental y en la forma de relacionarse de nuestros hijos. Muchas veces con la mejor de las intenciones, debido a nuestros miedos, inseguridades, falta de autocontrol y de conocimiento con el objetivo de ayudar y educar a nuestros hijos, de forma consciente o inconsciente tenemos actitudes dañinas hacia ellos. A continuación, te voy a comentar algunas de esas actitudes: • Sobreproteger: Debido a tus miedos e inseguridades para que tus hijos no sufran no permites que se equivoquen, que tomen sus propias decisiones. Por ejemplo, no les dejas salir con los amigos, estas constantemente supervisando lo que es su responsabilidad para que no se olviden como tienen que comportarse y lo que tienen que hacer. • Manipular: Chantajeas o manipulas de forma consciente o inconsciente las emociones y las convicciones de tus hijos para conseguir tus objetivos. Por ejemplo, si sale con los amigos le dices que te va a dejar sola en casa, que te a va dar un gran disgusto si suspende. • Despreciar: Afecta directamente al autoconcepto y a la autoestima de tus hijos. Hace que no se sientan valorados. Esta actitud está bastante normalizada en el día a día, sobre todo cuando tus hijos no actúan como tú quieres. Por ejemplo, decirle que es tonto, que es un vago, que va a ser un fracasado, compararlo con otros niños. • Entrometerse: Estas constantemente pendiente de lo que hacen tus hijos, no les dejas tener su espacio de privacidad. Por ejemplo, controlas lo que dicen y hacen constantemente con los amigos y con las personas que se relacionan, opinas constantemente sobre las decisiones que toma, supervisas todas sus decisiones, respondes por ellos cuando se les pregunta. • Implicar: Le cuentas tus problemas personales a tus hijos esperando que te ayuden y te apoyen delegando así la responsabilidad de tus problemas en tus hijos, lo cual no les corresponde. Por ejemplo, cuando tienes problemas con su padre o madre o en el trabajo le cuentas lo que te pasa y tú eres responsable de solucionar esa situación. • Perfección: Les exiges a tus hijos que cuanto mejor hagan las cosas o más destaquen más valor tendrán como personas. Por ejemplo, tiene que ser el mejor en algún deporte o en sus estudios o entre sus amigos. • Competencia: Compites con tus hijos y sus logros ya que no aceptas que tus hijos sean mejores que tú. Por ejemplo, te enfadas y le faltas al respeto cuando te gana en algún juego o deporte, o habla mejor que tú algún idioma. ¿Cómo puede afectar a los hijos estas actitudes tóxicas? Los progenitores son los que salvaguardan la seguridad de los hijos y los encargados de apoyarles y acompañarles en su desarrollo y crecimiento. Por lo cual las actitudes que te he comentado anteriormente de los padres y/o madres tóxicas hacen que tengan relaciones no basadas en la confianza ni en relaciones personales saludables. Más bien tendrán relaciones destructivas, serán emocionalmente dependientes y no tendrán figuras de apego saludable. Además, desarrollarán dificultades para establecer relaciones basadas en la confianza, tendrán baja autoestima e serán inseguras. ¿Qué puedo hacer para dejar de ser un padre o una madre tóxica? Ser padres a veces no es sencillo, sabemos que no somos padres perfectos, pero hay un límite para todo. Ser consciente y/o reconocer que como padre o madre actúas a veces o siempre de forma tóxica no es nada agradable, pero es necesario para encontrar soluciones por tu bien y por el de tus hijos. Pero, es el primer paso para darte cuenta que puedes hacer las cosas de distinta forma y comenzar a desaprender y a aprender una nueva forma para ser un padre o madre respetuosa. Tenemos que tener en cuenta que la relación que hemos tenido y tenemos con nuestros padres, en la mayoría de casos condiciona la relación que tenemos con nuestros hijos. Con esto no quiero que juzgues a tus padres, ya que ellos con lo que sabían y sus heridas vividas hicieron y hacen lo mejor que creen y saben. Sino que hagas consciente aquello que te hace daño y a partir de ahí aprender de esas situaciones para transformarlas y no replicarlas con tus hijos. Para ello es importante que investigues que tipo de crianza has tenido, es decir, que actitudes tenían tu padre y tu madre contigo. ¿Qué tipo de actitudes o comportamientos han tenido mi padre y/o madre en mi crianza? Es importante saber que todo tipo de abusos como físicos, con golpes, pellizcos, empujones, mordiscos, arañazos …, sexuales e incluso verbales con insultos, menosprecios, comparaciones, situaciones de ridiculización … dejan secuelas en los hijos que lo han vivido. Los padres y madres inmaduros que no saben gestionar sus emociones, autorregularse y tienen poca tolerancia a la frustración, con adicciones, rígidos, manipuladores, narcisistas y con algún trastorno no tratado también dejan secuelas importantes en sus hijos. El haber sido criado por un padre y/o una madre de este tipo hace que los hijos tengan baja autoestima, problemas en la gestión de emociones ya que no saben canalizar correctamente sus emociones y tienen falta de autocontrol ya que son impulsivas ante situaciones de estrés. Todo esto lo solemos ver en profundidad tanto en mi programa de acompañamiento individual Renueva tu Vida y la de tus Hijos como en el grupal Disfruta de una nueva vida tras tu divorcio. Dependiendo de las situaciones vividas en la infancia con el padre y/o la madre las secuelas en la adultez son distintas. Estas situaciones vividas durante la infancia condicionan a la hora de educar a tus hijos cuando eres padre o madre. Por ello es importante ser consciente que si quieres tener una relación de respeto y de conexión con tus hijos hay que trabajar en sustituir ciertas actitudes por comportamientos menos dañinos y más respetuosos. A veces te pasa que reaccionas de malas formas con tus hijos y luego te sientes culpable y no sabes cómo hacerlo para no reaccionar. Comunicarte de forma más respetuosa, sin gritos, castigos ni chantajes emocionales poniendo limites si es posible. Si quieres saber cómo hacerlo y mejorar la relación con tus hijos. Me puedes contactar vía WhatsApp y hablamos cómo puedo ayudarte. Espero que toda esta información te haya servido para ser más consciente en tu rol de padre o madre. Disfruta y ten una semana genial. Nos vemos en el próximo episodio. Un abrazo Miren
Hoy quiero contarte cómo puedes hacer daño a tus hijos si tienes una relación toxica con tu pareja o marido. Muchas veces no somos conscientes del daño que hacemos a nuestros hijos cuando estamos en una relación insana. Una persona que maltrata física y/o psicológicamente, humilla, chantajea, desprecia a su pareja de forma indirecta está realizando ese maltrato sobre sus hijos. Estos hijos de forma silenciosa viven esos gritos, chantajes, miedos e inseguridades y ellos también son víctimas en esa relación. Esas situaciones abusivas vividas afectan a su desarrollo, su autoconcepto, su autoestima y a su forma de relacionarse con otras personas en el presente y en el futuro. Les dejan traumas, secuelas, inseguridades y en muchos casos aprenden a relacionarse de una forma disfuncional. Además, de manera inconsciente repiten esos patrones de comportamiento que han normalizado e interiorizado. El crecer en ese entorno tóxico provoca heridas emocionales, son heridas de la infancia que dejan cicatrices. En muchas ocasiones esas heridas quedan abiertas haciendo que no tengan una relación sana consigo mismos ni con los demás. El tener esa relación insana con los padres hace que las heridas de la infancia se acentúen porque cuando somos pequeños ya de por sí somos susceptibles a muchas situaciones. Por eso, es importante que como padres seamos conscientes de educar a nuestros hijos en un entorno respetuoso y con límites sanos para que se sientan seguros y crezcan felices. Es necesario que nuestros hijos sean educados sin faltas de respeto a nivel físico o psicológico, menosprecios, amenazas, miedos, gritos, insultos, castigos, indiferencia etc. Cuando se les enseña a respetar a través de amenazas, miedos, castigos y faltas de respeto entonces se genera miedo y se educa a través del miedo y de esta forma se condiciona y limita a las personas. Todas estas actitudes en lugar de acercarnos a nuestros hijos nos alejan de ellos. Hacen que tengan miedo a comunicarse con nosotros y evaden contarnos situaciones que viven en el día a día por las consecuencias, las reacciones inesperadas o desproporcionadas que puedan surgir. Cuando lo más normal es lo contrario, que nuestros hijos se puedan comunicar con nosotros de forma tranquila y que sientan que pueden contar con nosotros. En muchos casos los padres proyectamos nuestras propias heridas de la infancia en los hijos y nos comunicarnos sin filtros. Es importante que los padres nos demos cuenta de ello y busquemos ayuda para sanar una herida que sentimos y que nos lleva a un conflicto constantemente y nos obstaculiza avanzar en la vida, en la relación de pareja y en la relación con los hijos. A continuación, te voy a contar algunas de las consecuencias que pueden vivir tus hijos si vives en una relación tóxica de pareja: 1. Aprenden a resolver los conflictos de forma disfuncional: con violencia, sumisión y manipulación. 2. Afrontan la vida con inseguridad, indecisión, baja autoestima y falta de amor hacia ellos mismos. 3. Tienen miedos, ansiedad e incluso depresión. 4. Tienen reacciones emocionales extremas y confusas. 5. Se sienten culpables porque creen que ellos son el origen de los conflictos de sus padres. 6. No saben construir relaciones sanas y de confianza tanto en el presente como en el futuro. 7. Creen que deben de ser los mejores para merecer el amor de sus padres. 8. Tienen miedo al fracaso y/o debido a la falta de autoestima. 9. Les cuesta expresar sus sentimientos, emociones y sus preocupaciones porque van a ser jugados y no se atreven a verbalizar lo que les pasa. Cuando se habla de separaciones o divorcios, uno de los comentarios que escucho habitualmente es “no me separo por mis hijos”. Puedo entender el porqué de este comentario ya que quien lo dice quiere lo mejor para sus hijos, pero lo cierto es que el que vivan en una relación de pareja tóxica no es la mejor opción para ellos. En principio cualquier cambio en la vida de nuestros hijos puede tener consecuencias tanto positivas como negativas. Todo cambio requiere de un tiempo de adaptación tanto para nosotros, los adultos como para los niños. Cuando sus referentes, es decir, papá y mamá deciden separarse o divorciarse en algunos casos ellos lo pasan mal ya que no saben cómo afrontar y gestionar esa nueva situación. Son momentos de incertidumbre para todos los miembros de la familia y sobre todo para nuestros hijos. Te digo que algunos casos, ya que no se puede generalizar, todo depende de las circunstancias particulares de cada uno y de la relación que tengan con sus progenitores. Si te puedo decir que hay casos donde la convivencia es tan desagradable que hay niños que quieren que sus padres se separen e incluso a veces no entienden porque sus padres siguen juntos o con la pareja que conviven. Además, hay una creencia generalizada que si los padres se separan o divorcian los hijos no van a ser felices. Esto no es debido a la separación en si sino por como lo gestionan la gran mayoría de padres y madres. Por lo cual, dependiendo de cómo lo gestionen los cónyuges este proceso será más o menos llevadero para ellos. Una vez pasado ese periodo de adaptación a la nueva situación Depende de la gestión y madurez de nosotros que ellos puedan adaptarse a esta nueva situación sin traumas y situaciones emocionales conflictivas. En estos casos, yo te recomiendo que priorices tu salud física y mental. Aunque sigas queriendo a la otra persona, tienes que ver con honestidad y sinceridad el tipo de relación que tienes y lo que esperas de ella. Si estas esperando a que algo cambie, a que la otra persona cambie o estas esperando a que aparezca otra persona en tu vida para tomar una decisión definitiva. Muchas veces estamos esperando a que ocurra algo y no tomamos decisiones y entonces dejamos a la deriva nuestra vida y ponemos en manos de otras personas la toma de decisiones y no tomamos las riendas de nuestra vida. Lo importante es que seas consciente de ello. SI estás viviendo una relación tóxica de pareja, y no sabes cómo afrontarlo te aconsejo que pidas ayuda y que tengas una persona que te guie en tu vida para seguir avanzando. De lo contrario tarde o temprano afectará tanto a la relación de pareja como a tu vida y la relación con tus hijos. Si quieres ampliar información te puedes unir a mi comunidad de Instagram en @mirenzurutuzacoach donde comparto información que te puede interesar. Espero que tengas una feliz semana. Un abrazo
Hoy quiero hacerte reflexionar sobre cómo te afecta a ti el vivir en una relación de pareja tóxica y no sólo a ti sino también a tus hijos. Una relación de pareja es tóxica cuando un miembro de la pareja o ambas se ven afectadas por la conducta y /o actitudes de la otra persona. En las parejas se pueden dar distintas situaciones, pero una cosa es tener problemas o mal entendidos por distintas formas de ver o afrontar las cosas y otra distinta es tener comportamientos y/o actitudes que no están bien. ¿Cómo sabes si estás en una relación tóxica? A veces una no es consciente que vive en una relación toxica porque tiene normalizados muchos de los comportamientos y actitudes que no están bien y no son respetuosas. A continuación vamos a ver algunos de esos comportamientos y actitudes de una relación no sana: Cuando hay actitudes de control y celos: - Le molesta que hagas planes, salgas con tus amigos/as. - Utiliza los chantajes emocionales. - Le gusta que dependas de él. - Cuando quiere hacer algo, planifica tu vida y no cuenta con tu opinión. - No respeta tu privacidad ni tu intimidad, te revisa el teléfono, las conversaciones etc. - Siente celos de las personas con las que te llevas bien e intenta aislarte de ellas. - Controla tus horarios. lo que haces, limita tu libertad, te pregunta porque llegas tarde, con quien has estado etc. Cuando hay actitudes de falta de respeto y conflictos. - Cuando tu pareja minimiza tus problemas. - Le resta importancia a tus logros. - Te fuerza a ceder constantemente en cualquier discusión. - Lo habitual es que te hable en tono agresivo y/o con insultos. - Te hace culpable de todos sus problemas. - Te ridiculiza delante de familiares, amigos y/o compañeros. - Mantienes relaciones sexuales aunque no quieras para evitar que se enfade. Se trata de relaciones destructivas de las cuales es difícil salir, ya que en muchas ocasiones dejas de ser tú y empiezas a comportarte como la otra persona quiere o le gusta que te comportes, hay poco apoyo emocional, sentimientos de culpa, manipulación y muchas inseguridades. Además, para evitar discusiones y sufrimiento una se va adaptando a la otra persona y deja de ser ella. Cuando vives una relación no sana todas estas situaciones afectan en tu autoconcepto, a tu autoestima y no crees que eres merecedora de tener una relación sana donde compartir tu vida con una persona que sume en tu vida. Este tipo de relaciones son muy dañinas y lo que yo aconsejo es que se pida ayuda y acompañamiento de una persona especializada en relaciones de pareja ya que salir en solitario de una relación de este tipo en la mayoría de los casos es difícil. Quiero decirte y recordarte que mereces ser feliz y compartir tu vida con una persona que te ame, te respete y te apoye. ¿Por qué hay personas que están en relaciones tóxicas? Visto desde fuera parece que no tiene mucho sentido tener una pareja tóxica o vivir una relación tóxica. Lo cierto es que es más común de lo que creemos y esto es debido a problemas de autoestima, dependencia emocional, traumas de la infancia, miedos, necesidades no cubiertas, creencias sobre el amor entre otros. Muchas veces estos comportamientos y actitudes tóxicas están normalizadas y son parte de creencias erróneas o porque no se conoce otra forma de vivir, de lo que es el amor o tener una relación sana. ¿Cómo puedes salir de una relación tóxica? Una relación es responsabilidad de dos personas. En este caso una de las personas es la que abusa de la otra con comportamientos y actitudes que te he comentado anteriormente y la otra parte es la que acepta soportarlo. Por ello en este caso las dos personas necesitaríais ayuda. Si hay un compromiso de mejorar la comunicación y la relación lo más adecuado es ir a terapia de pareja para que ambos con la ayuda de un terapeuta de parejas trabajéis una nueva forma de comunicación desde el respeto mutuo. En el caso que una de las partes no esté dispuesta a dar el paso, lo más recomendable es romper esa relación. Además de romper esa relación recomiendo trabajar en el autoconocimiento, la autoestima y las relaciones de pareja a través de un coach especializado que te ayudará a entender porque has elegido esa persona como pareja y poder sacar un aprendizaje de esa relación para que en el futuro tengas una relación basada en el respeto y el amor. ¿Cómo afecta a tus hijos? Este tipo de relaciones tóxicas no les beneficia en nada a tus hijos, sino todo lo contrario. Muchas veces no podemos imaginar o no somos conscientes del impacto y del daño emocional y psicológico que tiene en nuestros hijos cuando viven en una relación tóxica o no sana. Por ello es muy importante romper o salir lo antes posible de este tipo de relaciones. Si crees que esta información le puede servir a alguien, compártelo. Si estás viviendo una relación toxica y necesitas ayuda o acompañamiento puedes contactarme a través de WhatsApp o solicitando una sesión gratuita donde te comentaré como puedo ayudarte para que salgas de esa situación. Que tengas una buena semana y nos vemos en el próximo episodio. Disfruta y se ejemplo. Un abrazo
En este episodio voy a hablarte de infidelidad y de cómo superar una separación o un divorcio por una infidelidad. El hecho de tomar la decisión de separarte o divorciarte en la mayoría de casos conlleva tener miedos e incertidumbres, si a esto le añadimos que la relación de pareja se ha roto por una infidelidad, todavía hay más dolor. No sé si has vivido una situación así o lo estás viviendo, pero lo cierto es que es una de las situaciones más complicadas y dolorosas para superar. Es importante trabajar las emociones y las creencias para llevar esta situación de la mejor manera posible y salir adelante fortalecida emocionalmente. Cuando descubres que tu pareja es infiel, se viven momentos de tensión y cada miembro de la pareja lo vive de distinta forma. Te sientes traicionada, enfadada y decepcionada, tu autoestima se siente mermada y a veces puedes sentir hasta ganas de vengarte de alguna manera. Además, te planteas preguntas como ¿Cómo ha podido ser? ¿Desde cuándo están juntos? ¿Cuándo ha podido pasar? y empiezas a investigar para intentar entender la situación. El miembro de la pareja que ha sido infiel, puede sentirse de alguna forma enfadado y culpa a su pareja porque tiene la percepción o la creencia que ha tenido que irse con otra persona ya que le faltaba algo en la pareja y busca una justificación racional. Te cuento que hay distintos factores que condicionan en mayor o en menor medida el dolor y el periodo de duelo del miembro de la pareja engañada. Estos tres factores son: 1. La forma en la que la persona se entera que hay una infidelidad: Ya sea por una tercera persona, por la propia pareja que se lo ha contado o porque la pareja siguiendo sus sospechas lo ha verificado. En este caso, a veces la persona infiel no afronta la realidad y niega las sospechas o las pruebas que su pareja ha encontrado, negando lo evidente y no haciéndose cargo de parte de su responsabilidad. 2. El tiempo que dura la infidelidad: Si es desde comienzos de la relación o del matrimonio, en un periodo puntual de altibajos en la relación o en un periodo de ausencia de uno de los miembros de la pareja. 3. El nivel de vínculo afectivo con la persona que ha sido infiel: Que haya sido algo puntual y no haya un vínculo afectivo o tiene una relación de pareja con esta persona y hay un vínculo afectivo. Es importante que sepas, que tu reacción ante la infidelidad es normal. Hay diferentes tipos y causas de infidelidad, con ello no estoy justificando la infidelidad, pero si es importante tener la información, ya que a veces nosotros vemos la punta del iceberg, el hecho en sí, que es la infidelidad. Si vamos más allá, se puede ver la parte del iceberg que se encuentra sumergida bajo el agua donde se pueden ver las causas de porque se ha producido esa infidelidad. La infidelidad es consecuencia de distintas causas. Estas causas pueden variar, puede ser por incompatibilidad de caracteres, por falta o mala comunicación en la pareja, por monotonía, por falta de compromiso, por falta de madurez emocional, por querer vivir nuevas sensaciones y experiencias, por no tomar la responsabilidad de dejar la relación cuando era el momento, por no querer afrontar la realidad, por falta de pasión o intimidad, etc. Según el Dr. Frank Pittman, todas las infidelidades no son iguales, y se pueden clasificar en tres grandes categorías, la infidelidad accidental, la infidelidad romántica y la infidelidad consensuada donde en las distintas formas el cónyuge es infiel motivado por distintas circunstancias y situaciones. Ser infiel es una decisión que toma la persona, y es su responsabilidad. Eso no exime que para que una relación de pareja funcione ambos tienen que hacerse responsables de la parte que les toca. Por eso es tan importante que haya una buena comunicación en la pareja y ambas personas compartan sus necesidades. Dependiendo de los valores, las circunstancias y los acuerdos a los que se llegó en la pareja, cada persona deberá evaluar y valorar si debe de perdonar, superar la infidelidad y seguir con la relación de pareja o tomar la decisión de divorciarse. Lo importante es sacar un aprendizaje de esta situación ya que a veces nos aferramos a lo que tenemos y conocemos y no vemos más allá. Puede que esta situación te ayude a replantearte el tipo de relación que tienes o has tenido y te gustaría tener, quizá te das cuenta que no es lo que realmente quieres para ti. Lo qué si es cierto, que una vez que la confianza ha sido tocada, uno de los pilares básicos en una relación de pareja, hay todo un ejercicio que realizar para recuperarse de esa situación. Mi recomendación es que busques ayuda en un coach especializado en estos temas para realizar un plan para superar toda esta situación y que te ayude y acompañe durante el periodo de duelo, para acortarlo y sacar los aprendizajes necesarios de esta situación y salir fortalecida. Aunque te parezca difícil si es posible que vuelvas a tener una relación en un futuro con otra persona que sea compatible contigo, pero eso sí, antes hay que poner ciertas cosas en orden para que no se repitan los mismos patrones. Ahora es el momento de dedicarte a ti, centrarte en ti y apoyar y acompañar a tus hijos a atravesar toda esta situación. Y verás a pesar del periodo de dolor que atravieses, cuando mires hacia atrás el gran camino que habrás recorrido. Serás mucho más sabia, más fuerte y más segura de ti misma. Si quieres ampliar información sobre las distintas fases del duelo que se atraviesan al separarte o divorciarte en mi página web www.mirenzurutuza.com puedes descargar mi Guía Práctica Gratis con las 8 Claves para afrontar tu divorcio y reorganizar tu vida familiar. Además, si necesitas apoyo y acompañamiento en mi página web puedes solicitar una sesión gratuita o me puedes contactar por WhatsApp y me cuentas tu situación y vemos cómo puedo ayudarte. Cuídate mucho Un abrazo
En este episodio voy a hablarte de cómo superar los miedos que te pueden surgir cuando tomas la decisión de divorciarte. Todos los cambios en la vida pueden generar miedo y en este caso más si se refiere a tu vida familiar. Cuando una pareja decide estar junta o se casa no suele pensar en separarse o divorciarse. Pero si llega el momento de esa decisión nos surgen los miedos e incertidumbres por nuestro futuro y en el caso que tengamos hijos, por el de nuestros hijos. Es algo natural. Lo importante es identificar esos miedos para poder afrontarlos y seguir adelante con nuestra vida. Además, en ese momento los miedos los vives como si fueran los mayores del mundo. Por un lado, tienes que tomar una decisión que te va hacer salir de tu zona de confort. Aunque no seas feliz en ella tienes tus hábitos, rutinas, costumbres junto a tu pareja, tus hijos y las personas que te rodean. Por otro lado, tu decisión va a sacarte de ahí a una zona de incertidumbre donde no sabes cómo va a transcurrir esta nueva etapa de tu vida. Además, dependiendo bajo qué circunstancias te separas o divorcias, el número de los miedos se multiplican. Es una época de incertidumbre que cuando miras hacia el futuro no sabes lo que va a pasar. Quizá ya conozcas casos de familiares, amigas o conocidas que ya han dado ese paso y puede que sus vivencias te condicionen. Te puedo decir que cada separación o divorcio es distinta ya que cada persona actúa de distinta forma en función de las circunstancias bajo las que se separa o divorcia, pero es cierto que a veces algunos patrones de comportamiento se repiten. No es lo mismo que os separéis de mutuo acuerdo, por una infidelidad, porque tú hayas tomado la decisión, o lo haya decidido tu pareja. Sea como sea los miedos y la incertidumbre están ahí. Voy a hablarte un poco de lo más importante que necesitas saber sobre el miedo. El miedo es una emoción básica que sentimos como seres humanos que somos. Hay dos tipos de miedo, el racional y el irracional. El miedo racional está relacionado con el instinto de supervivencia y funciona como un mecanismo de alerta para protegernos. El miedo irracional es un miedo excesivo que no podemos controlarlo y nos sentimos incapaces de enfrentarnos a él y nos hace sufrir. Sentir miedo no es malo, tiene una función protectora, pero debemos de buscar un equilibrio para que esta emoción no controle nuestra vida y nos ayude a no dejar de hacer cosas por miedo. Si sientes miedo, como lo sentí yo, a la hora de tomar la decisión de separarte o divorciarte, ahora te voy a comentar algunas pautas para que puedas ponerlas en práctica. 1. Acepta que tienes miedo e incertidumbre y no lo niegues. No pasa nada por tener miedo, es normal. 2. Identifica cuáles son tus miedos específicos para poder afrontarlos. Te comento algunos miedos más comunes: Miedo al conflicto, a reconocer que cometiste un error, a la vorágine emocional (rabia, ira, frustración, tristeza…), al fracaso, a la soledad, al cambio, a sufrir, a asumir la responsabilidad financiera, a tomar decisiones, a empezar de nuevo, a como afectara a tus hijos (como decírselo, el tipo de custodia, como se sentirán…), etc. 3. Investiga de donde procede ese miedo, cuando fue la primera vez que lo sentiste. Viene de tu infancia, de tu convivencia con tu pareja, de algún comentario de tus padres, de tu pareja, de algún familiar etc. 4. Pon al miedo a tu lado y pregúntate según el miedo o los miedos que tengas ¿Qué es lo peor que me puede pasar si me enfrento a este miedo? ¿Y lo mejor? 5. Responde a estas preguntas. Visualízate sin ese miedo. ¿Qué es lo que podrías hacer? ¿Qué beneficios tendrías si lo superas? ¿En qué cambiaría tu vida? 6. Visualízate sin ese miedo. No estás sola, la gran mayoría de personas que nos hemos separado o divorciado nos hemos enfrentado en algún momento a alguno o algunos de estos miedos. Si los miedos te tienen paralizada en tu vida y no te dejan avanzar. Pide ayuda para poder superarlos ya que te sentirás liberada y tu vida mejorará. ¿Cuál es el mayor miedo para ti? Si quieres que te ayude, me puedes localizar en mi web mirenzurutuza.com donde puedes solicitar una sesión gratuita conmigo o escribirme un wasap. Espero que tengas una buena semana, Disfruta y se ejemplo. Un abrazo
Hoy en este episodio te voy a hablar sobre cómo saber si te tienes que divorciar o no y que cosas deberías de tener en cuenta antes de tomar una decisión. Puede que estrés atravesando un momento de incertidumbre, de no saber qué es lo mejor para ti y tus hijos. Quizá ya has tomado una decisión, en ese caso mi intención es darte más claridad sobre la decisión que has tomado. A lo largo de estos minutos vamos a reflexionar sobre todo este tema porque no es lo mismo verlo desde fuera como espectadora o estar dentro de una relación y tener que tomar una decisión tan importante con lo que todo ello conlleva para tu vida, la de tus hijos y tu pareja. Es un momento donde se juntan, las dudas, la incertidumbre, los miedos. Miedos como podré salir sola adelante, como va afectar esto a mis hijos, como me va afectar a nivel económico, como voy a afrontar los momentos de soledad, voy a tomar la decisión correcta o no. Y Cuántas veces te has preguntado… ¿Me merece la pena seguir en esta relación? ¿Estaré mejor con él o sin él? ¿Mejorará esta situación? ¿Y si me separo que va a pasar con mis hijos? ¿Voy a quedarme sola para siempre? Son preguntas que te planteas cuando en algún momento decides separarte o divorciarte. Sobre todo cuando hay situaciones difíciles con tu pareja, discusiones fuertes, faltas de respeto, te sientes incomprendida, hay indiferencia, falta de comunicación o muy mala comunicación, infidelidades etc. En estos casos parece que la causa y la justificación de la separación o el divorcio es como más clara. Hay otras situaciones donde los motivos no son tan claros o evidentes y es como que hasta debes de justificar el porqué de la separación o el divorcio. Situaciones que se pueden producir derivadas de la convivencia, los hijos y de los problemas del día a día. En muchos casos con el paso del tiempo las relaciones de pareja se van degastando y deteriorando. Lo que comenzó como un proyecto en común de formar una familia, con amor, expectativas e ilusiones con el paso del tiempo se diluyen porque ya no hay ningún proyecto común, hay necesidades no cubiertas, los valores de ambos no están alineados, cada uno sigue su camino etc. En este episodio no te voy a hablar de la separación o divorcio por una infidelidad, ya que este tema creo que necesita todo un episodio para poder comentarlo. Con toda esa incertidumbre y vorágine emocional que se vive en este momento de tomar una decisión a veces es difícil pensar con claridad y tomar una decisión clara. Un día crees que lo mejor es separarte, lo tienes como muy claro. Al día siguiente piensas que bueno puedes seguir viviendo así y además sabes que tu amiga que se divorció lo está pasando mal y tú no quieres pasar por ello. Puedes pasar meses, incluso años pensando si te separas o te divorcias o no. Sé que es difícil dar el paso y tomar una decisión firme a no ser que haya un motivo muy claro y evidente para separarse o divorciarse. Por eso yo lo veo como un proceso desde el primer pensamiento que tienes sobre separarte a divorciarte hasta que maduras la idea y finalmente decides separarte. Por eso mi consejo es Cuando llegues a este punto debes de tener en cuenta estos tres pasos que te voy a comentar 1. STOP: Deja de darle vueltas en tu cabeza a todo lo negativo que ves en la relación, en tu pareja y salir del bucle de los pensamientos negativos, repetitivos y destructivos. La separación o el divorcio no es un fracaso, es una etapa más de nuestra vida donde hay un montón de aprendizajes. Sé que ahora, en esta fase es difícil hablarte de aprendizajes, pero con el tiempo podrás ver toda la situación desde otra perspectiva y serás más consciente de muchas d e las situaciones vividas. Cuando te separas o divorcias no se destruye la familia sino que se transforma en otro tipo de familia. Hoy en día hay infinidad de tipos de familias, y en este caso se pasa de una familia tradicional, a una familia donde papa y mama están separados o divorciados y viven en distintas casas. Sé que es difícil, pero para tomar la decisión más acertada necesitas ver la situación de forma más objetiva, ya que si le comentas a tu pareja todo lo que tu estas viviendo y sintiendo, puede que él lo vea y viva de distinta forma ya que cada uno de nosotros estamos condicionados según las vivencias y experiencias que hemos tenido a lo largo de nuestra vida y esto hace que cada uno tenga unas creencias que puede que los dos coincidáis o no. Muchas veces estas creencias son las que nos impiden avanzar y nos limitan y no son totalmente reales. Creencias basadas en temas culturales y religiosas, en lo que se espera de nosotros, y en las experiencias vividas. 2. EVALÚA: Cuáles son tus sentimientos y tu situación real. Para ello coge papel y boli y responde a estas preguntas que te van a proporcionar bastante información y claridad. Pregúntate ¿Por qué estas con tu pareja, que es lo que te aporta? ¿Cuáles son tus valores, si vuestros valores están alineados? ¿Qué tipo de relación te gustaría tener? ¿Cuáles son tus no negociables en tu relación? ¿Hasta qué punto estas dispuesta a relacionarte o a comunicarte de mejor manera con él? Puedes visualizar con todo tipo de detalles como ves y cómo te sientes en tu relación de pareja junto con tus hijos en 6 meses, a un año e incluso a 5 años. Este ejercicio te va ayudar y te va a dar información. 3. DECIDE: Es una decisión importante en tu vida por lo cual no te puedes precipitar. Todo lleva su tiempo y proceso y lo que antes quizás no lo veías tan claro ahora si lo ves o viceversa. Una vez que tengas toda esta información Tienes diferentes opciones. • Si decides seguir con la relación que estás viviendo a pesar de no estar a gusto con tu pareja. Si no hay un compromiso de cambio y responsabilidad las cosas probablemente no van a ir a mejor, más bien irán a peor, es cuestión de tiempo. • Si hay un compromiso de cambio y responsabilidad por tu parte e incluso por parte de tu pareja, puedes intentar buscar apoyo y ayuda a través de libros, cursos, el apoyo de una persona especializada en temas de pareja, un coach, psicólogo y aprender nuevas herramientas con el objetivo de aprender para mejorar vuestra comunicación y relación familiar. Lo ideal sería hacerlo junto con tu pareja, ya que una relación es cosas de dos. De no ser así, te animo a que lo hagas tú ya que te va ayudar a ser más consciente de la situación y vas a tener mucha información que te va ayudar a mejorar tu vida ya sea para seguir con tu pareja o para separarte o divorciarte. • Si decides dejar la relación, habrá un periodo de duelo, de vorágine emocional, pero se sale adelante como hemos salido muchas de nosotras a pesar de muchas adversidades. Necesitarás aprender a gestionar todo este proceso para que sea lo más llevadero posible tanto para ti como para tus hijos. Quizá pases un periodo de emociones encontradas, de indecisión por lo que pudo haber sido y no fue, pero después de la tormenta siempre llega la calma. Tu vida continua y si lo tomas como un aprendizaje saldrás mucho más fortalecida de esta situación y tu vida mejorará. Pero antes de tomar ninguna decisión, quiero que sepas algunas cosas: 1. Tienes derecho y te mereces ser feliz Nada ni nadie te debe de quitar ese derecho. Tu eres la persona que decide sobre tu vida y la que decide si esa persona suma o resta en tu vida, si te aporta o no te aporta y creo que ya me entiendes. no estoy hablando de tema económico. Porque si tú no lo haces por ti, recuerda que nadie lo va hacer. 2. Eres responsable de tu vida Con esto te quiero decir, que debes de ser tú la que tiene el control de tu vida, decidir lo que quieres para ti y tus hijos y hacer lo que sea necesario para conseguirlo. De no ser así la persona tendrá el control de tu vida y eso no es lo mejor para ti. 3. Tu pareja no va a cambiar por arte de magia Para ello, primero tienes que decirle lo que te molesta o lo que necesitas tu para estar a gusto en tu relación. Él tiene unos hábitos y una forma de actuar. Cambiar los hábitos y formas de actuar de una persona requiere tiempo y trabajo. Para que la persona cambie se tienen que dar ciertas circunstancias: 1. Ser consciente que tiene ese hábito, actitud o forma de actuar 2. Reconocer que le gustaría cambiarlo o mejorarlo 3. Querer hacerlo 4. Tener información suficiente para saber cuáles son los pasos que debe de seguir para cambiar 5. Poner su atención y esfuerzo para llevarlo a cabo 6. Crear ese nuevo hábito 7. Interiorizarlo, para que pueda realizarlo de forma automática. Para ello tiene que estar abierto, motivado y tener paciencia para hacer estos cambios que perduren en el tiempo. No esperes que la otra persona sea la única que debe de cambiar. Seguramente tú también tendrás que cambiar ciertas actitudes. Porque una relación es cosas de dos y ambos tenéis necesidades y debéis estar implicados en la mejora del día a día. 4. Cuando decides te liberas El tiempo va pasando y debes de tomar una decisión porque mientras no decides no cambia nada. Cuando tomas una decisión comienzas a tomar el control de tu vida. Es el primer paso para salir de la situación donde estas. Ahí ya tienes un propósito y una estrategia y las cosas empiezan a cambiar y puedes comenzar a replantearte la situación. Cuando tomamos decisiones, a veces tenemos miedos ya que no sabemos si es la decisión correcta o incorrecta. En ese caso ponemos al miedo a nuestro lado en lugar de enfrente y seguimos adelante. 5. Si hay posibilidades, mejora tu relación Si todavía existe amor y tienes tus dudas y no sabes que hacer, busca información, respuestas, todo lo que necesitas saber sobre pautas para comunicarte con tu pareja, etc. Después háblalo con él, pon todas las cartas sobre la mesa para saber cuáles son sus necesidades, qué es lo que quiere y piensa, hasta donde está dispuesto a remar en la misma dirección o si ya ha tirado la toalla. A partir de ahí puedes comenzar a tomar decisiones de forma conjunta porque la pareja es cosa de dos o e
Hola Soy Miren Zurutuza. Bienvenida a madres separadas/divorciadas afectivas y efectivas donde te propongo una conversación contigo con temas sobre los que reflexionar y sobre los que mejorar. Un espacio donde podrás realizarte y crear esa vida que de verdad te mereces. Mi misión es ayudarte y acompañarte en todo este camino y proceso para que no te sientas sola y puedas dar pasos en tu vida para tu bienestar y la de tus hijos, por su puesto sin perjudicar a nadie. Compartiré contigo todo lo que he aprendido en todos estos años. Como he aprendido a salir adelante a pesar de todas las dificultades que se presentan en el día a día y como he conseguido transformar mi vida y la de muchos padres. Por qué ese ha sido mi propio proceso desde mi divorcio y a lo que me he dedicado estos últimos diez años. Además me hace muy feliz compartir contigo todo lo aprendido para poder ayudarte a ti y a tus hijos en todo este camino. Opino que tú eres la persona más importante en tu vida, por ello si tu estas bien, si cultivas tu fortaleza interior, tu fortaleza emocional, tu CARE, podrás transformar tu vida, obtendrás los resultados que quieras y por extensión tu felicidad. Y todo esto comienza con tu autoconocimento. ¿Imaginas mejorar tu vida, transformarla, vivir en paz y con calma sintiéndote segura de ti misma y todo ello junto a tus hijos? Eso es lo que vas a vivir a partir de ahora. Tu dosis semanal de información, inspiración para mejorar y transformar tu vida con tus hijos. Disfruta y se ejemplo. Que tengas una buena semana. Un abrazo
Comments 
loading
Download from Google Play
Download from App Store