En el mundo mediático de la moda, hay pocos documentales de calidad dedicados a ella. Es por esa razón que damos la bienvenida a una película que narra la aventura de Colette, una tienda conceptual icónica e innovadora en la rue Saint-Honoré de París que estuvo en pie durante 20 años, hasta 2017. Los cineastas Hugues y Eliane Lawson-Body siguieron los últimos meses de la tienda y lo plasmaron en el documental 'Colette mon amour'.
El año 2020 pasará a la historia, aunque no necesariamente por las mejores razones. Sin embargo, en enero, la pandemia aún no estaba en el radar de todos, y la Semana de la Moda de París se llevó a cabo según lo programado. La gente se abrazó, se besó y no lo pensó dos veces antes de subirse a un avión para asistir al evento. Pero cuando Francia quedó bloqueada en marzo, el mundo de la moda tuvo que reinventarse, encontrando nuevas formas de crear, consumir y comunicarse.
La alta costura libanesa es venerada en todo el mundo por su extravagancia, un saber hacer artesanal sin igual plasmado en colecciones destinadas especialmente a clientes de Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos. Pero recientemente, la crisis económica paralizante, la pandemia de Covid-19 y, por supuesto, la catastrófica explosión del puerto de Beirut en agosto han amenazado a esta industria como nunca antes. Algunos de los nombres más importantes de la moda de Beirut como Elie Saab y Tony Ward, hablaron con France 24 sobre su experiencia en los últimos meses.
Este año, la 35ª edición del Festival de Hyères tendría lugar en abril, pero la pandemia hizo que la competencia internacional más importante de la moda se realizara en octubre. Esta vez el festival ha capturado, como cada año, la expresión y el espíritu de su tiempo: el reciclaje. El principal premio de accesorios de moda fue para el dúo de hermanos del País Vasco, Juana y Ddiddue Etcheberry, mientras que el codiciado Gran Premio del Festival fue para el diseñador belga Tom Van Der Borght. Conozca más de cerca este importante certamen internacional de moda, fotografía y accesorios.
Nadie sabe realmente lo que traerá el próximo verano, pero sabemos que tendremos que vestirnos y elegir entre dos grandes tendencias exhibidas en París: el streetwear o el drapeado. ¿Se llevarán el día los seductores volúmenes de Yohji Yamamoto o será el estilo a menudo irónico de Prune Goldschmidt? ¿O quizás una elección entre las creaciones que abrazan las formas del diseñador maliense-senegalés Lamine Kouyaté y la relajada ‘Street Couture’ de Christelle Kocher? France 24 nos acerca a estas tendencias que marcan la moda prêt-à-porter en la capital francesa.
Mientras el mundo de la moda lamenta la muerte de Kenzo Takada, París vuelve a ser sede de desfiles presenciales en el Prêt-à-Porter verano 2021. Bajo el liderazgo del director creativo Felipe Oliveira Baptista, Kenzo da la alarma sobre la destrucción de las poblaciones globales de abejas. En Dior, mientras tanto, Maria Grazia Chiuri explora cómo la ropa está ahora más que nunca en la esfera privada. Y el diseñador nigeriano Kenneth Ize usa su desfile para enviar un mensaje desafiante a los líderes de su país: la celebración de su identidad queer.
La diseñadora francesa Marine Serre es considerada como una de las líderes de esta nueva generación de mentes creativas que trabajan para reformar el sistema de la moda. Su colección para el verano 2021 es 50% reciclada, en una presentación que fue llevada a cabo mediante la película 'Amor Fati'. Un trabajo en el que la creadora trata de expresar cómo manejamos nuestra vida cotidiana, con frecuencia confusa y tormentosa.
Para mantenerse en sintonía con la era actual, la moda de lujo sabe que necesita repensar su imagen derrochadora y asociarse con movimientos alternativos. En Francia, Louis Vuitton, La Redoute e incluso los icónicos almacenes Galeries Lafayette han unido fuerzas con Casa 93, una escuela de moda gratuita en París que defiende la igualdad de oportunidades y además enseña las virtudes del ‘upcycling’.
‘Figital’ es un neologismo: la fusión entre ‘físico’ y ‘digital’. El distanciamiento social significa que los desfiles de moda tradicionales no regresarán por un tiempo y en su lugar, están siendo remplazados por contenido difundido en las redes sociales.
¿Desfilar o no? Esa es la pregunta crucial que todas las empresas de moda se hacen en estos tiempos sin precedentes. Las grandes reuniones todavía están prohibidas, la necesidad de distanciamiento social persiste y las personalidades aún prefieren no viajar. Entonces, ¿qué futuro tiene la pasarela tradicional? Para su colección Cruceros 2021, Dior organizó un deslumbrante espectáculo sin público, en el corazón de la ciudad italiana de Lecce. Con la convicción de que participar en el renacimiento de las culturas ancestrales, podría, a largo plazo, reducir el impacto de la crisis.
¿Y si escribir historias y llevarlas a la pantalla resultara ser un buen antídoto para el estrés causado por la pandemia y la contención? Con esta premisa, nuestro periodista Pascal Mourier, que enseña Ciencias de la Comunicación en varias escuelas de moda, pidió a sus estudiantes escribir y producir una película sobre moda desde sus propios hogares. La idea del proyecto era usar solo los materiales disponibles en el momento de la cuarentena y contar la historia de la interacción de un personaje con una prenda de vestir.
"¡Declaro inaugurada la Semana Parisina de la Alta Costura!", expresa la supermodelo británica Naomi Campbell, anunciando el comienzo de una nueva era de la moda digital, además, abrazando los objetivos del movimiento ‘Black Lives Matter’. Los desfiles están prohibidos en este período de crisis sanitaria provocada por el Covid-19, por lo que las casas de moda publican videos en las redes sociales para exhibir sus colecciones. La alta costura revive sus tradiciones centenarias: muestra solo unos pocos modelos, difunde las imágenes y hace que las personas sueñen.
Las mentes creativas y los líderes empresariales de todo el sector textil reconocen la difícil época por la que atraviesa el mundo debido a la pandemia de Covid-19, pero buscan reinventarse y reconstruirse. La casa de moda Tony Ward, en Beirut, busca adaptarse al mundo actual y ve con esperanza las oportunidades que se vislumbran a medida que se comienzan a abrir los mercados. Como también lo hace la marca Atelier Bartavelle en Marsella, que se abastece localmente y lucha por mantenerse. En Taipei, dos marcas superan los límites de la innovación: DYCTeam y Just In XX.
El brote de Covid-19 también está afectando al mundo de la moda. Muchos especialistas divagan sobre cómo serán las rutinas de producción y comercio después de esta crisis. Una de las principales preguntas gira en torno a si volverán los viejos hábitos o habrá una transformación en el sistema. En medio del debate, el Instituto de la Moda en París invita a las empresas a repensar sus discursos y pide compromisos concretos.
El brote de Covid-19 está replanteando el futuro para muchos en la industria de la moda. Ganadores del concurso Open My Med 2021, organizado por la Maison Mod, han girado su propuesta a creaciones con material reciclado o consolidando sus colecciones. Pero otros, como Quoï Alexander, no tienen muy claro su futuro luego de perder dinero en pedidos que fueron cancelados. “Ahora enseño inglés por internet a niños en China”, dijo. A todo esto, la pregunta es ¿cómo nos reponemos? Por ahora tiene una sola respuesta: “Para aprender a caminar, primero hay que caerse”.
La cantante Shingai trabaja en su nuevo sencillo ´Tambores de Guerra´ y desde su confinamiento llama a cambiar la sociedad desde el cabello. Lo mismo piensa Kelly Massol, fundadora de ´Les Secrets de Loly´, quien nos recuerda la popularidad que otorga llevar el cabello natural.
En septiembre de 2019, Marine Serre se destacó al portar una mascarilla durante un desfile. Hoy, la pandemia nos obliga a llevar este 'accesorio'. La moda ha sabido adaptarse a los tiempos y el brote de Covid-19 no ha sido la excepción. Ante la paralización de la industria, varias casas empiezan a elaboran mascarillas.
París fue una vez más la plataforma de lanzamiento de las colecciones de alta costura para el verano y si bien esa parte de la industria de la moda está reservada para pocos, puede impulsar valores emancipadores tanto en sus usuarios como en quienes trabajan en ella.
El brote de Covid-19 ha obligado a cerca de la mitad de la población del planeta a estar confinada. Una situación que ha llevado a muchos a cambiar su estilo de vida. La industria de la moda no ha sido la excepción y permanece paralizada (como muchas actividades) pero en medio de la situación algunos diseñadores trabajan elaborando mascarillas, que son repartidas para evitar el contagio. Por otro lado, en esta edición de Moda, recogimos consejos de representantes de la industria para llevar de mejor manera el confinamiento.
Lyon, en Francia, es considerada como la cuna del cine y de la industria textil. Apalancada en esa teoría, la ciudad puso en marcha el primer festival de cine dedicado a la industria de la moda, un espacio financiado por empresas del sector con el objetivo de permitir que el público se familiarice con el universo conceptual de una marca. Anaïs Chazel fue la ganadora del premio para estudiantes al desarrollar una pieza que sigue el recorrido de una prenda de vestir. Ed Picard ganó el premio por su trabajo en homenaje al séptimo arte.