Después de 5 años de silencio radial, vuelve esta voz —más ronca, más española y con un dedo menos operativo—. En este primer capítulo te cuento por qué dejé de grabar en 2020 y todo lo que me pasó desde entonces: nacionalidad concedida (¡olé!), mudanza sola en Barcelona (¡por fin!), robos nocturnos con final estilo thriller doméstico, y un accidente que terminó con la mano izquierda medio inútil gracias a una lata de pintura. Sí, literalmente dejé un dedo como ofrenda a mi independencia.Entre risas, trauma y un poco de anestesia emocional, repaso cómo una lata y extranjerías pueden dejarte más marcada que cualquier ex.Spoiler: este episodio no es apto para cardíacos... ni para zurdos.
Volver, con todo! Que el tropezón del 2020 no sea una caída sino un envión.
Volver a casa y ver la vida con otros ojos. Vernos desde otra perspectiva.
Después de meses de caos mundial, vamos entendiendo que tenemos que vivir con esta situación y si! La vida tiene que continuar.
Después de mucho tiempo decidí hablar sobre mi historia como mujer viajera "adulta" si es que tener 40 años me define como tal. Decidí renunciar a la vida tradicional que tenía, dejé mi puesto de gerente de marketing, alquilé mi casa y me fui a la India para recorrer Asia durante un año. Trabajé online, conocí gente increíble y si bien suena muy comer, rezar, amar, volví sin mi Bardem pero con el deseo de transmitir mi experiencia, personas que conocí y que me acompañaron estos años.