¡La vida es un regalo!Un obsequio deDios para los que la reciben. En esta tierra hay más de 6,000 millones de habitantes. Todos tienen vida; peromuy pocos descubren en ella elmilagro del amor de su Creador, mucho menos se preocupan por conocerlo. Por eso el mundo está como está…lleno demaldad, violencia y destrucción por doquier.
Desear bienestar, que todo salga bien, desenlaces exitosos y ánimo enmedio de toda adversidad, es algo que conmucha naturalidad y constancia nos deseamos unos a otros. Cuando nos va bien y salimos adelante en situaciones difíciles decimos que fuimos bendecidos por Dios, y no cabe duda que así ha sido. ¡Dios es bueno! Pero…¿Cada cuánto nos bendice? O ¿muy de vez en cuando? ¡No! Sus bendiciones sobre nuestra vida son el pan de todos los días. “Por lamisericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias, Nuevas son cada mañana, Grande es Tu Fidelidad.” (Lamentaciones 3: 22,23)
¿Alguna vez dejaste de luchar por alcanzar unameta que te propusiste? ¿O quizá hubo desafíos que no quisiste tomar? ¿Proyectos que nunca comenzaste por verlos difíciles? ¿Has perdido el deseo de esforzarte? ¿Sabes tú que muchísimas personas limitaron su crecimiento y el desarrollo de sus dones y virtudes porque no creyeron que esto era posible? ¡Porque se menospreciaron a sí mismos! Hay una conformidad o dejadez que no es buena para tu vida ni agradable a Dios.
Al crearnos, Dios nos hizo con un propósito grandioso y es que compartamos con Él la Eternidad. Al mismo tiempo, para que agradecidos y en total reconocimiento de su grandeza, le adoremos con júbilo y le sirvamos con alegría desde ahora y para siempre. Cada uno de los que encontramos en Él nuestro todo, damos testimonio de su amor, bondad y declaramos que Él es el único Rey Soberano,Autor de la Vida, ¡digno de toda alabanza! Muchas personas en esta vida exaltan, vitorean, aplauden, idolatran a cualquier individuo, hombre omujer, grupomusical, a algún equipo deportivo, y aun a líderes terrenales, todo lo cual es temporal y vano; pues todo esto en su momento ha fallado o desaparecido. Muy pocos se deciden por lo mejor: ¡Darle la Gloria al Dios Único!
El tiempo es escurridizo, no se detiene, pasa y no regresa. Lo tenemos medido, cada quien tiene su medida asignada. Es como un reloj de arena que se voltea al nacer cada persona, y tarde o temprano, según su asignación, llega a su fin; al menos en esta vida. ¿Cuánto tiempo nos queda? ¡Imposible saberlo!; pero, lo importante es aprovechar lo que nos viene cada día a la mano. ¡No lo desperdiciemos!, Demos lo mejor de nosotros ¡HOY! ¡Vive!, ¡Disfruta!, sé feliz con lo que tienes y sobre todo busca a Dios, a Jesucristo, fuente de todo gozo y paz. “Aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos…” (Efesios 5:16).
¡Cuánta diferencia puede traer a nuestra vida una palabra de aliento, una reflexión que motiva, un pensamiento que encamina nuestros pasos! La Biblia dice: “La palabra a su tiempo, cuán buena es”. Hoy quiero compartir con ustedes pensamientos de ánimo y reflexión. Breves reflexiones que nos llevan a evaluar diferentes temas del diario vivir, de nuestra relación con Él y de nuestra actitud ante la vida y las personas que nos rodean.
Algunos celebran la navidad sin valorar el mensaje de Dios en ello, enfocándose en tradiciones y cuentos fantasiosos. Otros preeren no celebrarlo y lo señalan como no agradable a Dios. Pero habemos varios que lo celebramos valorando lo que signicó y signica hasta el día de hoy para toda la humanidad que Jesús, el Hijo de Dios haya venido a este mundo para traernos amor, perdón, gozo y salvación ¡Jesús es Dios!
No es fácil generar cambios en nuestra vida. Se dice que para forjar un buen hábito hay que estar repitiendo esa acción nueva durante aproximadamente 21 días y entonces se transformará en algo real en nuestra vida…¿Verdad que así dicen? Y cuántas veces hemos tratado con algo así y pareciera que para algunas cosas no alcanzan los 21 días, y para otras —aunque alcanzan, je, je— los malos hábitos como que anduvieran al asecho para ver en qué momento se pueden introducir otra vez a ¡seguir causando problemas! Creo que así es la vida, un constante esforzarnos pormantener las cosas buenas en vigencia y las malas alejadas, enterradas y bajo 100 candados. Y aún así, cualHoudinis prodigiosos (un granmago escapista del pasado) cuando sentimos ¡ya andan sueltos y listos para atraparnos! No nos confiemos, velemos como dice uno de los temas, estemos atentos, hay que cuidar nuestro territorio, ¡HAY QUE REFLEXIONAR!
JESÚS es Rey. Rey de Reyes y Señor de Señores. Este es un título categórico que nadie puede discutir. Él es Dios hecho hombre, y como hombre, peleó con dignidad y gallardía para recuperar el control de todas las cosas y establecer que la justicia de Dios es perfecta. ¿Quiere decir que en algúnmomento se había perdido el orden? ¿Que habían fallado los planes perfectos de Dios de crear un ser que lo amara voluntariamente y obedeciera y fuera fiel de corazón? ¡No! Pero sí hubo en su momento alguien que quiso estorbar este plan e incluso acusar a Dios de injusto cuando fue castigado por sus acciones malas, como que si Dios mismo tuviera la culpa por ello.
El tiempo pasa, la vida se pasa, los años pasan, qué importante es hacer un recuento de todo lo que hemos vivido bueno, o “malo” digamos. Una granmayoría de la gente, recuerdamás lo “malo” y lo transforman en tristeza, amargura, resentimiento, queja, dolor, etc.
Desde que somos bebés de algunamaneramuy inducida y hasta aplaudida por los que nos rodean, aprendemos a pedir; a que todo nos lo den, a establecer un sentimiento de propiedad sobre las cosas y las personas, al punto de creer que todo nos pertenece, que todo es “MÍO” y si se nos negaba algo que queríamos o deseábamos para nosotros, la solución era llorar, berrinchar, patalear, etc.
En el ir y venir de la vida, siempre habrá momentos en los cuales tocamos fondo, económicamente, sentimentalmente, laboralmente, en fin, en cualquier área de nuestra vida. Esto significa escases y dificultad. ¿Has estado alguna vez en una situación así? O, ¿sencillamente atraviesas por un momento donde debes dar pasos de FE creyendo que Dios responderá favorablemente aunque ahora no veas aún su respuesta o provisión? “Dios Proveerá” Esa frase se volvió tan singular desde cuando Abraham llevaba a Isaac a sacrificarlo y el muchacho pregunta, ¿Y dónde está el cordero? Y Abraham respondía: “Dios proveerá hijo”, y así fue.
Conclusión de las reflexiones acerca de la navidad
Al recibir a Jesucristo en tu vida, o renovar tu pacto con Él, es importante que te acerques y aprendas a oír su voz. Empieza a ejercitar tus sentidos espirituales para captar cuando te está hablando y hacia donde te dirige cada día. “Dios es espíritu y los que le adoran, en espíritu y verdad es necesario que le adoren” Juan 4:24. Mucha gente hoy se queja de que Dios no les habla; pero, y ¿si Dios sí les ha hablado? Cuántos en aquel día tendrán que reconocer que fueron indiferentes a la dirección y guianza de Dios para sus vidas.
Estamos llegando al final de esta travesía de lecturas de Diciembre. Hemos hablado tanto de lo que en esta fecha se conmemora ¡Qué fiestas más inspiradoras de amor y compartimiento! ¡Verdad que se siente todo tan especial! Pero, y ¿qué queda después de la celebración? Fotos, recuerdos, nostalgia, alegrías de una noche o quizás tristezas; endeudamiento, y algunas veces hasta problemas, enfermedades y enojos.
El tiempo de Dios es perfecto. Él tiene un plan trazado y ordenado para todos los acontecimientos en este mundo. Jesús vino a este mundo en el tiempo idóneo para incursionar. Inició su ministerio en el tiempo correcto, la edad correcta y en el lugar correcto. Dios nos ha asignado a todos una misión, que tiene un cumplimiento exacto. A todos los hombres les ha dado la oportunidad de seguirlo, les ha visitado y hablado en su momento. El problema es que a muchos se les pasa o no entendieron que era su momento: La misma nación Judía, tuvo la visita del Mesías y no se dieron cuenta, no lo quisieron recibir. Algunos dicen: “Si yo hubiera vivido en esa época, yo sí lo hubiera reconocido” ¿Quién sabe si no al igual que la mayoría, hasta lo hubieran crucicado?; pero no vivimos esa época, y nos ha tocado vivir en tiempos del fin.
“Encomienda a Jehová tu camino, confía en él y el hará” Salmo 37:5. Las promesas de Dios para los que creen y confían en Él y le obedecen son cosas tan reales y poderosas. Nunca pierden vigencia, y no se extinguirán. Las veremos cumplirse en nuestras vidas siempre. El cuidado de Dios es real, eso fue lo que se vivió en el tiempo de la venida de Jesús a este mundo. Dios tenía todo preparado; nada escapó de su cuidado, el llamamiento de María, el acompañamiento de José, el pesebre en Belén, la visita inesperada de los sabios de Oriente con presentes que luego serían tan útiles en los momentos difíciles; las apariciones de Ángeles orientando, aclarando, y aun advirtiendo sobre los peligros que se cernían sobre la vida de Jesús; en n, la presencia real de un Dios sobrenatural siempre estará alrededor de los que le aman.
Aquel bebé que nació en Belén, era totalmente hombre. Ninguna característica que lo hiciera superior a ningún otro, al menos biológicamente. Tuvo que aprender a hablar, a caminar, a correr, fue alimentado como todo bebé, criado por sus padres terrenales; creció y jugó como todo niño, eso sí, desde que tuvo conciencia se le hizo ver que tenía un llamado y procedencia especial.