Pediremos por Papa Francisco y sus intenciones.
Pediremos por las personas que padecen de algún tipo de cáncer.
Pediremos por las vocaciones sacerdotales, religiosas y laicales.
Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. Juan 3,17
«¡Ah! ¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres tú: el Santo de Dios.» Lucas 4,31-34