Hoy seguimos está vocación de Dios que nos ama a una misión: la misión de anunciar su amor y su paz en un mundo que tiende a rechazar la luz de la verdad.
Hoy reflexionamos sobre el llamado a la libertad que el Señor Dios nos hace.
Hoy reflexionamos sobre el sentido de la redención de Jesucristo y como nuestras dificultades están vinculadas a Él por medio de los Sacramentos confiados a la Iglesia Católica.
Hoy reflexionamos la forma en que vivimos la Semana Santa y la forma en que comenzamos a vivir la pascua
Hoy reflexionamos sobre la misericordia de Dios y sobre la misericordia que nos tenemos a nosotros mismos y a los demás.
Hoy analizamos una de las parábolas más bellas que Jesús nuestro Señor nos ha regalado para hacernos ver qué Dios es rico en misericordia y ama a todos sus hijo, aguardando con ansias el regreso de quienes están lejanos.
Hoy entendemos nuestra relación con Dios de una manera más profunda y arraigada.
Hoy recordamos la tres manifestaciones de Jesús como nuestro Dios y salvador así como las gracias especiales del Sacramento del Bautismo.
Antes de la misa del domingo 19 de diciembre 4to del tiempo de adviento, entendemos una de las profecías del profeta Miqueas en la universalidad de Dios y la necesidad de un redentor, la necesidad de la nueva alianza y a María Santísima como su portadora.
Hoy entendemos que vivimos en un adviento permanente. A la espera de retorno de nuestro Señor Jesucristo.
Hoy entendemos de qué manera podemos confiar de Dios y como manifestamos está confianza.
En este episodio reflexionamos sobre los mandamientos de la ley de Dios y como la alegría de cumplirlos nos conduce a la Santidad que es nuestro primer propósito en la vida.
Hoy el Señor nos muestra cuál es la verdadera riqueza, y como podemos entrar al reino de los cielos.
Hoy reflexionamos sobre nuestra actitud con otras confesiones Cristianas y sobre todo lo que nos es ocasión de pecado.
Hoy aprendemos a no guiarnos por criterios humanos y a servir a los demás en nombre de Cristo
Hoy reflexionamos sobre el valor de escuchar y proclamar la verdad, y reflexionamos sobre el valor de la vida desde su concepción.
Hoy aprendemos que de nada nos sirven la tradiciones en cuestiones de fe, si no tenemos en claro que primero tenemos que cambiar y purificar nuestros corazones
Hoy entendemos que no hay mejor camino para nuestras vidas que el camino del Señor, sus mandamientos y su amor.
Hoy vemos la grandeza que Dios le ha conferido a nuestra madre la Virgen María.