¿Qué tan seguido nos invade un sentimiento de culpa? Nos vamos a atrever a contestar esta pregunta...casi todo el tiempo. Nos sentimos culpables por no comer bien, por no hacer suficiente ejercicio, por trabajar mucho o trabajar muy poco. Nos sentimos culpables hasta de las cosas más insignificantes. Las mujeres tendemos a sentir más culpa que los hombres, ¿por qué? Quizá es esa predisposición que tenemos hacia la empatía y compasión. Esto nos hace más susceptibles a echarnos encima los problemas de alguien más o la responsabilidad de que alguien más se esta sintiendo mal.

Pero la verdad es que, si lo pensamos bien, la culpa, es un sentimiento que no la mayor parte del tiempo trae connotaciones negativas y si no la sabemos manejar, muy rara vez, tiene un resultado positivo. La culpa la mayor parte del tiempo no motiva cambio. 

Es importante hacer una introspección de nuestro sentimiento de culpa. Preguntarnos, ¿por qué nos sentimos culpables? Y tomar acción para cambiar esas cosas que nos hacen sentir así. No estamos diciendo que la culpa siempre es mala, después de todo demuestra que tenemos corazón, pero sentirnos así por todo, todo el tiempo es un calvario. 

No es hasta que realmente nos deje de importar cómo otros ven nuestras acciones y decisiones que podemos sentirnos libres de culpa y comenzar a vivir nuestra vida.