Disociación entre el deseo y la realidad política
Description
Las encuestas publicadas en las últimas horas en diferentes medios de
comunicación muestran varias tendencias en la intención de voto. Los
escándalos que ha vivido el PSOE, y que sigue viviendo, han supuesto que
el apoyo al partido de Sánchez haya disminuido respecto a unos niveles
que ya eran muy bajos.
El PP se mantiene con un porcentaje de votos que según los diferentes sondeos está entre el 31 y el 33 por ciento, y Vox se dispara hasta un 17 por ciento. Algunas encuestas apuntan a que el partido de Santiago Abascal está ya recibiendo una importante transferencia de voto de los socialistas. Ya veremos, cuando llegue el momento, cómo se materializa la intención de voto de las encuestas. Las respuestas no son las mismas cuando hay fecha para unos comicios.
Una
mayoría amplia de españoles cree que deberían adelantarse las
elecciones, pero el 70 por ciento está convencido de que ese adelanto no
se va a producir. Es lógico que cunda el desencanto y aumente la
desconfianza. Y este es uno de los efectos más dañinos que puede tener
esta legislatura. La desconfianza en la clase política y en el sistema
democrático es un fantasma que recorre todo el mundo occidental.
Hasta ahora España ha estado a salvo del gran crecimiento de opciones radicales que se ha producido en muchos países de Europa. El sistema clásico de partidos sigue en pie, pero puede verse muy dañado por la disociación entre deseo y realidad. A eso se suma el deterioro de las instituciones. El empeño en prolongar la legislatura no puede, sino empeorar las cosas.




