En El Gato al Agua, analizamos sin tapujos los temas que otros prefieren ignorar. La subordinación de la política española a los separatismos regionales amenaza con hacer inviable una democracia sana. Mientras tanto, España se ve cada vez más presionada en el tablero internacional: el reconocimiento del Estado palestino, las crecientes críticas a Israel por la crisis humanitaria en Gaza, y una Marruecos que escala sus provocaciones contra Ceuta y Melilla.
¿Estamos ante una pérdida de control institucional y geopolítico? ¿Quién se atreverá a poner orden en medio del caos?