1272. La experiencia en podcasting es algo que, con los años, he tenido que aprender a mirar con otros ojos, porque muchas veces ni yo mismo soy consciente del camino que llevo recorrido hasta que me pongo a contarlo, a explicarlo o, sencillamente, a asesorar a alguien que está dando sus primeros pasos en este mundo. Hay momentos en los que doy por hecho que todo el mundo sabe lo que yo sé, que cualquier persona que se lanza a crear un podcast tiene claro qué decisiones tomar, qué peligros evitar y qué fases superar. Pero no es así. 
 
Han pasado muchos proyectos por mis manos. Algunos los he vivido como oyente, otros como amigo cercano y otros como productor directo. He visto podcast que nacen con una ilusión enorme y tropiezan en la misma piedra que tropezaron otros cientos antes. He visto ideas brillantes que se desinflan porque no se hicieron las preguntas adecuadas antes de lanzarse, y he acompañado a personas que necesitaban un simple empujón para ordenar los pasos y avanzar con seguridad. Todo eso también forma parte del trabajo que hago, aunque a veces no lo recuerde, y por eso me parecía importante compartirlo.
 
Cuando alguien me contacta para una asesoría o una consultoría, veo repetidos muchos patrones que yo mismo viví hace años o que he visto vivirse de cerca. Y por eso en estos acompañamientos suelo insistir en la importancia de planificar más allá de los primeros episodios. Está muy bien pensar en qué micrófono comprar o en el invitado del capítulo dos, pero lo realmente decisivo llega después: cuando llevas seis episodios publicados, cuando te toca mantener la constancia, cuando te enfrentas a los primeros momentos de bajón o cuando tienes que reorganizar tu calendario porque tu vida personal se cruza con tu proyecto. Ahí es donde esa experiencia previa se convierte en un mapa que ayuda a anticipar lo que puede venir.
 
También me encuentro a menudo con personas que ya tienen su podcast rodando y quieren dar un salto: mejorar su calidad, reducir el tiempo de producción o hacer que su proyecto empiece a generarle algún ingreso. Y aquí sucede igual. Hay cosas que funcionan, cosas que no y cosas que, sencillamente, solo puedes entender cuando ya has pasado por ellas muchas veces. De ahí que en estas sesiones suela insistir en mirar más allá de lo urgente, en detectar los cuellos de botella del propio proyecto y en plantear mejoras que quizá no sean para hoy, pero sí para dentro de unos meses, cuando el podcast ya tenga un ritmo y una identidad claras.
 
Si a esto le sumamos los proyectos que requieren directamente delegar el proceso completo, la perspectiva cambia todavía más. Cuando alguien me dice “quiero hacer un podcast, pero no quiero encargarme de nada que no sea disfrutar del contenido”, me siento como pez en el agua. Este trabajo existe para eso, para acompañar y para que el creador se centre en lo que realmente quiere hacer, sin perderse en decisiones técnicas o administrativas que no le aportan nada. Y es ahí donde la experiencia acumulada se convierte en una herramienta extremadamente útil, no solo para resolver dudas, sino para anticiparlas antes de que aparezcan.
 
Otro terreno donde esta experiencia pesa (y mucho) es en los directos. Por un lado está grabar un podcast en vivo, que ya es complejo de por sí; por otro, organizar un evento donde el podcast forme parte de una experiencia completa para quienes lo viven allí, desde la producción del sonido hasta la gestión de entradas, la escenografía, la logística y todo aquello que nunca se ve, pero que determina que una noche funcione o no. Cuando echo la vista atrás y repaso todas las Podnights Madrid, las colaboraciones y los directos que he producido, me doy cuenta de que ahí también hay un recorrido enorme que a veces doy por hecho. Y no debería. 

Y ya que menciono lo de dar cosas por hechas, aprovecho para recordar algo que repito mucho últimamente: tener una página web propia para tu podcast no es opcional. Es imprescindible. Lo es para el SEO, para la presencia digital, para enlazar como es debido en buscadores y, ahora también, para que herramientas como ChatGPT indexen vuestro contenido de la forma correcta. Otro ejemplo claro de esas cosas que aprendí a base de insistir y que me hubiera gustado que alguien me explicara al principio.
 
En fin, que este episodio es casi un recordatorio personal de que la experiencia que acumulo no es solo un conjunto de anécdotas o aprendizajes, sino una herramienta real que utilizo día a día para ayudar a quienes quieren empezar o mejorar su proyecto.

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La voz que puedes escuchar en la intro del podcast es de Juan Navarro Torelló (PoniendoVoces) y el diseño visual es de Antonio Poveda. La dirección, grabación y locución corre a cargo de Jorge Marín. La sintonía que puedes escuchar en cada capítulo ha sido creada por Jason Show y se titula: 2 Above Zero. 
 
'Al otro lado del micrófono' es una creación de EOVE Productora.