Sentirnos no merecedores de la abundancia ilimitada que Dios/Universo nos ofrece, es una de las acciones menos consciente que vivenciamos en el día a día. Hasta con el simple hecho de tener resistencia de recibir un halago o pequeño detalle, sin darnos cuenta la rechazamos. Te invito a escuchar una pequeña anécdota a través del segundo episodio, en donde en un gesto de auto-observación pude hacerlo consciente. Gracias por escucharme! Con amor: Vero🌙💕