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Author: Ana Llia Vargas

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17 Episodes
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LA MAYORIA DE LA GENTE NO QUIERE SER AYUDADA, NO VIVE BIEN, NO TIENE RELACIONES EXITOSAS, PERO NO QUIEREN AYUDA. DISTORSION DE LOS ROLES CUANDO UNO DE LOS CONYUGES NO ASUME SU RESPONSABILIDAD, MUCHAS VECES CONVIRTIENDOSE EN UN HIJO MAS EN LUGAR DE SER PILAR DE LA FAMILIA. CUANDOLOS HIJOS TIENEN QUE ASUMIR ROLES QUE LES CORRESPONDERIAN A LOS PADRES, SER HIJOS PARENTALES, HIJOS AISLADOS, HIJOS PROBLEMATICOS.
LA MAYORIA DE LA GENTE NO QUIERE SER AYUDADA, NO VIVE BIEN, NO TIENE RELACIONES EXITOSAS, PERO NO QUIEREN AYUDA. DISTORSION DE LOS ROLES CUANDO UNO DE LOS CONYUGES NO ASUME SU RESPONSABILIDAD, MUCHAS VECES CONVIRTIENDOSE EN UN HIJO MAS EN LUGAR DE SER PILAR DE LA FAMILIA. CUANDOLOS HIJOS TIENEN QUE ASUMIR ROLES QUE LES CORRESPONDERIAN A LOS PADRES, SER HIJOS PARENTALES, HIJOS AISLADOS, HIJOS PROBLEMATICOS.
Adicciones a las emociones Aura Medina De Wit Psicoterapeuta, instructora de meditación y autora de los libros: “Amor o codependencia” y “Lo que ellos dicen de ellas” La mayor parte de nuestras vidas la hemos basado en evitar sentir miedos y dolor. Esto apoya nuestro pensamiento y conductas fantasiosas
Vacios y necesidades

Vacios y necesidades

2014-09-0743:16

Vacíos y necesidades Aura Medina De Wit Psicoterapeuta, instructora de meditación y autora de los libros: “Amor o codependencia” y “Lo que ellos dicen de ellas” Un agujero es una sensación de vacío dentro de nosotros en relación a algún aspecto de nuestro ser que no fue nutrido y por lo mismo no se desarrolló.
Aura Medina De Wit Psicoterapeuta, instructora de meditación y autora de los libros: “¿Amor o codependencia? ” y “Lo que ellos dicen de ellas”. ¿Se han preguntado qué tanto pueden llegar a afectar las heridas de nuestras infancias? Pues mucho de nuestro comportamiento como adulto refleja lo que nos pasó como niños. Escuchen para saber todo al respecto.
PROVIENE DE TRAUMAS NO RESUELTOS DE SITUACIONES PASADAS Y ES URGENTE TRABAJARLOS PARA ESTAR BIEN CON NOSOTROS MISMOS, NUESTRA PAREJA Y EN LAS DIVERSAS SITUACIONES Y RELACIONES QUE NOS RODEAN. AURA MEDINA DE WIT PSICOTERAPEUTA, INSTRUCTORA DE MEDITACION, AUTORA DE LOS LIBROS ¿AMOR O CODEPENDENCIA? Y "LO QUE ELLOS DICEN DE ELLAS"
Alanon es una fraternidad de familiares y amigos de alcoholicos que sufren los esragos de convivir con ellos....y el termino "hijo adulto" valida las vivencias y efectos que tvo en un adulto habrese criado en un hogar donde hubo alcoholismo o drogadiccion.......y Salvador Valadez es un compañero Alanon, hijo adulto con bastante recuperacion que da conferencias
Los Doce Pasos son un conjunto de principios de naturaleza espiritual que, si se adoptan como una forma de vida, pueden liberar al enfermo de la obsesión por beber y transformarle en un ser íntegro, útil y feliz. Muchas personas, no alcohólicas, dicen que, como consecuencia de practicar los Doce Pasos de A.A. han podido enfrentarse a otras dificultades de la vida. Opinan que los Doce Pasos pueden significar más que la sobriedad para los bebedores problema. Los consideran como un camino hacia una vida feliz y útil para muchas personas, sean o no sean alcohólicas
No hay forma más hermosa y más eficaz de autoridad que el ejemplo. Podemos decir que educamos como somos, no como decimos que los demás deben ser. De forma muy insistente sermoneamos a nuestros hijos y a quienes comparten nuestro entorno tratándoles de aconsejar sobre el modo deseable de comportarse, olvidando muchas veces que nuestras acciones contradicen nuestras palabras. No sé si conoceréis la anécdota que se cuenta de Mahatma Gandhi acerca de la importancia del ejemplo. De cualquier manera, es bueno recordarla y reflexionar sobre ella. Una madre le llevó a su hijo de seis años y le dijo a Mahatma Ghandi: - Se lo ruego, Mahatma, dígale a mi hijo que no coma más azúcar, es diabético y arriesga su vida haciéndolo. A mí no me hace caso y estoy sufriendo por él. - Lo siento, señora, ahora no puedo hacerlo. Traiga a su hijo dentro de quince días. Sorprendida, la mujer le dio las gracias y le prometió que haría lo que le había pedido. Quince días después, volvió con su hijo. Gandhi miró a los ojos al muchacho y le dijo: - Chico, deja de comer azúcar. - ¿Por qué me pidió que lo trajera dos semanas después?, preguntó, desconcertada, la madre. Podía haberle dicho lo mismo la primera vez. Gandhi respondió: - Hace quince días yo comía azúcar. Gandhi entendía que le faltaba autoridad para decir a alguien que no comiera azúcar mientras él la comía. La autenticidad consiste precisamente en eso, en no engañarse a uno mismo. Y en no engañar a los demás. Podía haberle dicho a la madre y a su hijo en la primera visita que no es bueno comer azúcar. Ellos no tenían por qué saber que él lo hacía, pero la coherencia y la autenticidad le impidieron decirlo
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
“Mi papá no es un hombre malo. Es una persona profundamente enferma”.El alcoholismo genera locura, cerrazón y se convierte en tragedia humana. Expuso el conferencista Salvador Valadez Fernández, del Grupo de Familia Al-Anon. Cuando un alcohólico detiene demasiada ingesta de alcohol se dañan los occipitales de su cerebro y esto genera una enfermedad que es locura y se llama “celotipia”. Los alcohólicos empiezan a celar a sus mujeres que jamás les han hecho nada, las atormentan y torturan de una manera infamante. La tercera causa de muerte a nivel mundial está relacionada con el alcoholismo. Se dijo durante con la conferencia con personas que han logrado conseguirla sobriedad en Alcohólicos Anónimos (AA). Se abundó en el tema como parte de la celebración del 40 aniversario de la llegada del mensaje de Al-Anon a Poza Rica. Se dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al alcoholismo como enfermedad incurable, pero no está socialmente aceptada. “Cualquier enfermo es sujeto de compasión, excepto el alcohólico”. El conferencista detalló que es la única droga socialmente aceptada, “puedes ir al súper y comprar”. Sin embargo el alcoholismo es una enfermedad que no está socialmente aceptada. Lamentó que en las escuelas de medicina del país se lleven sólo dos horas en toda la carrera para hablar sobre la intoxicación alcohólica, sus impactos y de cómo eliminar la contaminación de un organismo. Pero los médicos llaman a los alcohólicos “borrachitos” y jamás les enseñan que es una enfermedad. Recalcó. La ciencia médica no ha encontrado una cura adecuada para esta enfermedad, lo único que ha resultado “impresionante” para combatir la enfermedad son los AA. Logran el 75 por ciento de recuperaciones. “Es alto en la ciencia”. El 50 por ciento se queda para siempre. Otro 25 fluctúa en recaídas hasta que se queda. Sólo el 25 por ciento descarta, “es un índice muy bajo para una enfermedad tan grave”. Explicó las tres clases de alcohólico: Ebrio, Sobrio y Seco. También las cuatro fases: Pre-alcohólica prodrómica, crítica y crónica. En ellas se experimentan cambios en conductas y personalidad. “Un alcohólico tiene doble personalidad. Una familia que viva con alcoholismo y tiene a dos personas en la misma”. Refirió. Además enfatizó que existen 17 características de personalidad alcohólica entre los bebedores con edades de 5 a 55 años. El consumo de alcohol inicia como una forma de resolver los problemas de culpabilidad, soledad, angustia, preocupación y ansiedad. Se curan los problemas internos, pero incrementan los externos. Finalizó argumentando que los alcohólicos consideran que las bebidas embriagantes son una medicina que resuelve todos los problemas. A eso se le llama, locura y cerrazón. Indicó.
Salvador Valadez es un servidor y no es representante oficial de ningún grupo de 12 pasos, sus conferencias son basadas en su experiencia. Su asociación con grupos de 12 pasos es solamente como orador e invitado especial. ¿Qué es Al-Anon? Los Grupos de Familia Al-Anon son una hermandad de parientes y amigos de alcohólicos que comparten sus experiencias, fortaleza y esperanza, con el fin de encontrarle solución a su problema común. Creemos que el alcoholismo es una enfermedad de la familia, y que un cambio de actitud puede ayudar a la recuperación. Al-Anon no está aliado con ninguna secta ni religión, entidad política, organización ni institución; no toma parte en controversias; no apoya ni combate ninguna causa. No existe cuota alguna para hacerse miembro. Al-Anon se mantiene a sí mismo por medio de las contribuciones voluntarias de sus miembros. En Al-Anon y Alateen perseguimos un único propósito: ayudar a los familiares de los alcohólicos. Hacemos esto practicando los Doce Pasos, dando la bienvenida y ofreciendo consuelo a los familiares de los alcohólicos y comprendiendo y animando al alcohólico.