Nada, que tenemos que seguir con el verano caluroso lleno de noticias lamentables y movimientos inexplicables por parte de la industria. Si ya el año pasado grabamos un programa dramático como fue el sonado cierre de Tango Gameworks y Arkane Austin, ahora vivimos otro nubarrón por parte de Xbox.

Está claro que Microsoft está dejando el terreno libre para su futuro en el mercado de los videojuegos: Inteligencia Artificial, Call of Duty y Game Pass; dejando de lado la mano de obra humana; la creatividad y dos décadas de historia viva en la industria del videojuego por el egoísmo de gente vestida con traje. Echaremos de menos hablar tan a menudo de Everwild y de Perfect Dark, pero los tiempos cambian.

Más allá de que se nos ha olvidado comentar sobre el videojuego de John Romero -Óscar está muy enfadado- entre otras cosas que siguen en el aire como la situación en algunos estudios en Blizzard, dejamos de lado para hablar del último gran exclusivo, al menos de forma temporal como ya sabemos, de PS5 como es Death Stranding 2: On the beach. Kojima en estado puro, para lo bueno y para lo malo.

Por último, comentamos un poco un evento que ha ocurrido y uno que está a nada de ocurrir... o no. El State of Play de Ghost of Yotei deja claro que Sucker Punch quiere darlo todo en la secuela de su IP más exitosa. Por otro lado, seguimos como buenas pirañas de tierra esperando un Nintendo Direct que no parece estar tan cerca ¿O sí?

La semana que viene habrá programa ya que hablaremos sobre Donkey Kong Bananza y lo que surja en la industria del videojuego. Este programa será muy especial ya que será el último de la temporada y por el momento el último que se grabará con los actuales compañeros.