En la primavera de 2018 recorrimos Marruecos con nuestra autocaravana durante aproximadamente 2 meses y medio y ha sido la experiencia viajera más intensa, divertida e increíble que hemos vivido. Pero no todo resulto así desde el principio. Cuando entramos en el país teníamos muchas dudas, miedos y prejuicios. Porque asombrosamente cuando llegas a Marruecos, después de cruzar los pocos kilómetros que lo separan de España, las reglas del juego cambian. La forma de entender la vida, las relaciones entre hombres y mujeres, las costumbres y las prioridades y un sinfín de cosas más son diferentes a lo conocido. Estamos hablando de convivir con las gentes, de entrar a sus casas, de compartir su comida y la nuestra, de tomarte tiempo para escuchar sus historias, de reírte con ellos, de conducir días enteros por un paisaje hipnótico, de subir y bajar enormes montañas que lo mismo te llevan al inmenso desierto como a las más salvajes playas del atlántico.