Con el paso del tiempo nuestras necesidades van cambiando, incluso nuestros gustos e inquietudes. Esto nos lleva a cambios en nuestro día a día, unos son pequeños y otros más grandes debido a tienen más repercusiones. Según nuestro momento vital hacemos y queremos unas situaciones u otras.

Esto implica que no es lo mismo lo que me mueve con 30 años que con 50.

A pesar de formar parte de nuestro proceso, nos cuesta aceptar que con el paso de los años nuestro cuerpo se transforma y necesita otras cosas, personas o situaciones distintas a las que tenemos en nuestra vida. Así como nos cuesta afrontar las nuevas etapas y en ocasiones los cambios se hacen dolorosos.

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Y recuerda que el propósito de la vida es ser feliz, te acompaño!