Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 26 de septiembre. Pero tú.
Update: 2025-09-26
Description
Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 26 de septiembre. Pero tú.
Salmo 3:3 NTV: "Pero tú, oh SEÑOR, eres un escudo que me rodea; eres mi gloria, el que sostiene mi cabeza en alto".
Si de verdad leyéramos con detenimiento la bendita palabra de Dios, con eso sería más que suficiente para encontrar en cada línea el mejor alimento y las mejores respuestas para nuestra vida. Este verso dice: "Pero tú, oh Señor, eres un escudo que me rodea; eres mi gloria, el que sostiene mi cabeza en alto".
Y si nos damos cuenta en detalle, el verso dice "eres" en presente y en singular. "Eres" y tú mismo lo puedes decir en voz alta en este momento y comenzar a decir a Dios: "Señor, tú eres todo lo que tengo, eres mi compañía, eres mi alegría, eres mi más alto escondite, eres mi descanso, eres mi consejero, eres mi ayudador, eres quien me conoce y eres quien tiene todo lo que necesito para vivir".
Solo con eso, con la conciencia que tú y yo podemos tener de ese "eres" de Dios, solo con eso ya tenemos suficiente para sentirnos protegidos por ese escudo que nos rodea y encontrar el descanso y la paz que necesitamos.
Vamos a orar.
Señor, gracias porque tú eres ahora y cada día eres real para mí. Nunca te has ido ni me has abandonado, pues tú mismo dices que nunca me dejarás y jamás me abandonarás. Hoy me entrego de nuevo a ti, agradecido y confiado de que sigues obrando tu perfecta voluntad en mi vida, en el nombre de Jesús. Amén.
Salmo 3:3 NTV: "Pero tú, oh SEÑOR, eres un escudo que me rodea; eres mi gloria, el que sostiene mi cabeza en alto".
Si de verdad leyéramos con detenimiento la bendita palabra de Dios, con eso sería más que suficiente para encontrar en cada línea el mejor alimento y las mejores respuestas para nuestra vida. Este verso dice: "Pero tú, oh Señor, eres un escudo que me rodea; eres mi gloria, el que sostiene mi cabeza en alto".
Y si nos damos cuenta en detalle, el verso dice "eres" en presente y en singular. "Eres" y tú mismo lo puedes decir en voz alta en este momento y comenzar a decir a Dios: "Señor, tú eres todo lo que tengo, eres mi compañía, eres mi alegría, eres mi más alto escondite, eres mi descanso, eres mi consejero, eres mi ayudador, eres quien me conoce y eres quien tiene todo lo que necesito para vivir".
Solo con eso, con la conciencia que tú y yo podemos tener de ese "eres" de Dios, solo con eso ya tenemos suficiente para sentirnos protegidos por ese escudo que nos rodea y encontrar el descanso y la paz que necesitamos.
Vamos a orar.
Señor, gracias porque tú eres ahora y cada día eres real para mí. Nunca te has ido ni me has abandonado, pues tú mismo dices que nunca me dejarás y jamás me abandonarás. Hoy me entrego de nuevo a ti, agradecido y confiado de que sigues obrando tu perfecta voluntad en mi vida, en el nombre de Jesús. Amén.
Comments
In Channel