Génesis 1:28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. (RV 60)

El libro de Génesis nos habla de genética divina, Dios le había dado bendiciones a su creación que no había hecho ni bien ni mal, Dios ya nos bendijo con toda bendición en lugares celestiales, Dios les bendijo y les habló diciendo cuatro cosas:

1) Fructificar.

2) Multiplicad.

3) Sojuzgad.

4) Señoread

Ese es el propósito divino para la creación de Dios, somos nueva criatura. Estamos abriendo un libro y vamos a ver algunos puntos interesantes sobre momentos en que el Señor les dijo que fructifiquen, que multipliquen, que  llenen la tierra, que la sojuzguen y señoreen.

Primero le dan esa bendición a Adán, pero él lo echa a perder, la tierra se llena de violencia, luego a Noé le dijeron que se fructifique y multiplique, después a Abraham, Isaac y Jacob. Por último, a José que también recibió esa misma bendición. Todos ellos fallaron, Adán le creyó a la serpiente, Noé se emborrachó, Abraham tuvo una mujer llamada Agar, Isaac trataba a su esposa como hermana, Jacob era mentiroso y tramposo, y también a José que daba malos reportes a sus hermanos siendo altanero.